Rosas blancas y su fotografía con uniforme escolar, hoy resguardan el ataúd blanco donde yace el cuerpo de la pequeña Yaz, quien tras el maltrato familiar del que era víctima, por poco más de cuatro meses, estuvo luchando contra la muerte en el hospital del IMSS La Margarita, donde finalmente, el pasado 28 de diciembre perdió la batalla.
Luego de que la Fiscalía General del Estado de Puebla (FGE) determinara entregar el cuerpo de la menor, a sus abuelos maternos, ya que los padres y la madrastra de la víctima que contaba con siete años de edad se encuentran detenidos, los restos de Yatziri fueron velados en la colonia Barranca Honda, donde la familia de la menor pidió solo la presencia de los dolientes, sin ninguna otra persona ajena.
Aunque a decir de la activista Frida Guerrera, quien ha acompañado a los deudos en todo el proceso, en el panteón de la junta auxiliar de San Pablo Xochimehucán les dijeron que no había lugar para enterrarla, después de presionar a las autoridades, se consiguió un espacio en el Panteón de La Piedad, donde este miércoles, familiares y amigos despedirá el cuerpo de la pequeña que estuvo bajo el cuidado de los médicos en terapia intensiva.
Cabe recordar que fue el 21 de agosto cuando la menor con la ayuda de vecinos, ingresó al área de Urgencias del IMSS La Margarita, debido a que tenía un pulmón colapsado y huellas de violación que posteriormente fueron descartadas.
A su llegada, la menor pedía que no la curaran, que la dejaran morir ya que sus padres le pegaban, situación que llegó a oídos de las autoridades, quienes abrieron una carpeta de investigación por los hechos, pues era la tercera vez que Yatziri ingresaba al hospital, una primera vez debido a que se le cayó el televisor en el pecho, y la segunda, por una situación intestinal.
Su hermana de 3 años, previamente, también había muerto bajo circunstancias extrañas. Alejandra Viridiana y Rafael, padre y madre de Yaz, fueron detenidos por la Fiscalía de Puebla el 27 de agosto, mientras que la madrastra y nueva pareja sentimental del padre de la menor, también fue asegurada pero el 5 de octubre, ya que todo habría ocurrido cuando la pequeña estaba al cuidado de su padre y madrastra identificada como Mónica N.
Los tres se encuentran en prisión, a la espera de que se resuelva su situación jurídica, ya que además de los cargos por violencia familiar, ahora posiblemente se le sumará el de homicidio en razón de parentesco.