Falta medio año para que asuma formalmente las riendas del gobierno del estado, pero Alejandro Armenta Mier ya deslizó aquellas que serán las primeras acciones que emprenderá una vez que releve en el cargo a Sergio Salomón Céspedes Peregrina.
Minutos después de recibir la constancia de mayoría que lo acredita como gobernador electo para el periodo 2024-2030, el morenista dijo que realizará una reforma a la Ley Orgánica del Estado de Puebla para cambiar la estructura actual de las dependencias que conforman el Poder Ejecutivo.
Habrá dos nuevas secretarías, una llamada del Deporte y la Juventud y otra que llevará por nombre Arte y Cultura, pero en términos generales la administración estatal tendrá menos dependencias en el próximo gobierno, adelantó el mandatario electo que rozó los dos millones de votos en la jornada electoral del pasado 2 de junio.
Tan entusiasmado se mostró con empezar a trabajar que anunció, año y medio antes, que su primer informe de gobierno será en la Aldea Ecoturística de La Malinche, que comenzará a construir cuando sea mandatario en funciones.
Importantes mensajes los emitidos por Armenta Mier tras recibir la constancia.
Subrayó, para los incrédulos, que no se olvidará de revisar la concesión del servicio de agua a la empresa Agua de Puebla para Todos, como prometió de manera reiterada en la fase de campaña, y de una vez envió un aviso a quienes pretenden incorporarse a su equipo de trabajo en los meses por venir: no habrá descanso ni tolerancia a la corrupción.
Los poblanos esperan un periodo de paz, de gobernabilidad y de desarrollo, condiciones que parecen viables frente a la oportunidad, después de ocho años de no tenerla, de contar con un mandatario estable y de seis años.
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Resulta extremadamente anticipado preguntar ahora a los actores políticos de Morena y la 4T sus aspiraciones políticas para la próxima elección, o para la siguiente sucesión de gobernador, pero, en el caso concreto de un personaje no resulta tan ocioso a la luz los acontecimientos ocurridos en el estado en el último año y medio.
“¿Ignacio Mier Velazco querrá competir nuevamente por la gubernatura dentro de seis años?”, es una interrogante que se hizo poco tiempo después de concluida la interna en Morena a finales del año pasado y que seguramente surgirá de manera tímida en estos días, después de que el otrora aspirante se ha convertido en senador electo y seguirá, como se sabe, como operador político de los designios presidenciales.
La pregunta se la hizo ayer un reportero en la entrega de su constancia de mayoría.
“¿Va a buscar la gubernatura en 2030?”, preguntó el comunicador Jaime López.
“No”, contestó “Nacho” Mier.
“Vamos a buscar sacar adelante los compromisos que tenemos con el pueblo de México. La responsabilidad que nos dieron no es una cosa menor, es una gran responsabilidad y tenemos un mandato que cumplir. Y a eso venimos”, agregó.
“¿Pero en el futuro no descartaría..?”, insistió el reportero.
“No”, reiteró Mier.
“Quién sabe si vivamos todavía. Primero que Dios nos de vida y que nos de la inteligencia, la sapiencia y el compromiso para no fallar a México”, remató.
Así aclaró las dudas el futuro senador, quien, por cierto, la semana pasada provocó con sus declaraciones parte de la caída que sufrió el “súper” peso por el temor de los capitales internacionales a las reformas constitucionales de López Obrador.
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Otro actor político que apareció para recibir su constancia de mayoría fue el priista Néstor Camarillo Medina, quien arribará al senado de la república gracias a la fórmula electoral que permite al primer lugar de la segunda fórmula hacerse de un sitio en el Congreso de la Unión.
En este caso no había preguntas que hacerle en torno a su futuro, sino, más bien, a su pasado reciente y a los vínculos del partido que encabezó con personajes como Tania Félix N, excandidata suplente a una diputación plurinominal detenida junto con seis presuntos criminales y vinculada a proceso por delitos graves.
“Voy a contestar todas sus preguntas una vez que termine este proceso, creo que hay muchos temas de los cuales quiero platicar con ustedes”, respondió Camarillo en modo de evasión y se dio a la fuga, literal.
