En este tiempo de Cuaresma, uno de los pasos más importantes para prepararnos para la Semana Santa es la confesión, por tal motivo, en esta temporada la Arquidiócesis de Puebla invita a los creyentes a acercarse a dicho sacramento para preparar su corazón a la celebración más importante del año, dentro de la Iglesia Católica.
La Semana Santa es la gran conmemoración anual del cristianismo en el que se recuerda la Pasión, muerte y resurrección de Jesús de Nazareth, un período de gran actividad litúrgica dentro de las diversas confesiones cristianas.
Durante estas fechas se celebran manifestaciones populares de fervor religioso en todo el mundo, entre las que destacan las procesiones católicas y las representaciones de la Pasión de Cristo, sin embargo, al ser una temporada de arrepentimiento, la confesión se convierte en un momento clave para esta celebración.
¿Qué es la confesión y por qué es importante realizarla?
Uno de los sacramentos que más se practica durante la Semana Santa es el de la confesión, algo que, aunque para muchos no es necesario hacerlo frente a un sacerdote y para otros sí, la realidad es que lo es, pero ¿de qué trata este sacramento?
De acuerdo con la Arquidiócesis de Puebla, la confesión es un sacramento de reconciliación y de curación, ya que, cuando las personas acuden a realizarlo, se hace con el objetivo de sanar, curar el alma y sanar el corazón, pues se convierte en el arrepentimiento de tus faltas ante un Dios, teniendo como intermediario el sacerdote.
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Ante la interrogante de que muchos se hacen, sobre por qué se debe uno de confesar, el Papa Francisco explica que el perdón de nuestros pecados no es algo que podamos darnos nosotros mismos.
“Yo no puedo decir: me perdono los pecados. El perdón se pide, se pide a otro, y en la Confesión pedimos el perdón a Jesús”, se lee en la publicación de la Arquidiócesis. Asimismo, agrega que “el perdón no es fruto de nuestros esfuerzos, sino que es un regalo, es un don del Espíritu Santo”.
La Confesión: una guía paso a paso
Seguramente los que estudiaron el catecismo e hicieron su primera comunión recordarán que el acto de confesarse no es complicado, sin embargo, para poder realizarlo de una mejor manera, existen cinco pasos, y entre ellos se encuentran:
Examen de conciencia: la persona se pone ante Dios que la ama y la quiere ayudar, y se analiza la vida, para abrir el corazón sin engaños. Para este primer paso, las personas se pueden ayudar de una guía para hacerlo bien.
Arrepentimiento: en esta parte la persona que se va a confesar debe de experimentar un verdadero dolor de haber pecado, porque se ha lastimado al que más lo ama, Dios.
Propósito de no volver a pecar: si verdadera se ama, no se puede seguir lastimando al amado. En este sentido, de nada sirve confesarse si no se quiere mejorar, por lo que se puede caer de nuevo por debilidad, pero lo importante es la lucha, no la caída.
Decir los pecados al confesor: el Sacerdote es un instrumento de Dios, por lo que es importante hacer a un lado la “vergüenza” o el “orgullo”, para abrir el alma, seguros de que es Dios quien escucha.
Recibir la absolución y cumplir la penitencia: de acuerdo a la Arquidiócesis de Puebla, este es el momento más hermoso, pues se recibe el perdón de Dios. En este sentido, la penitencia es un acto sencillo que representa la reparación por la o las faltas cometidas.
