Solo Juan Francisco Palencia, técnico universitario, conoce bien las piezas faltantes en el rompecabezas para abrochar la salvación el próximo torneo.
“El Gatillero” reveló a la prensa, en la víspera al duelo contra los Diablos Rojos del Toluca, su intención de reforzar al equipo de cara al Clausura 2019, donde él y La Manada buscarán la preservación de la categoría.
El domingo, tras el triunfo 2 por 0 sobre Toluca, se le cuestionó sobre las posibles altas; pero fiel a los tiempos, con la liguilla a punto de arrancar, no dijo nombres ni las posiciones a tonificar durante el próximo régimen de transferencias.
Sin embargo, El Sol de Puebla desde su perspectiva presenta a continuación un análisis de las posibles zonas del campo a reforzar por La Manada durante el mercado de invierno hacia un Clausura 2019 más arduo y complicado, en relación al torneo vivido durante los últimos seis meses.
LOBOS PRESUME DE…
Para facilitar el análisis, es más sencillo comenzar por las posiciones donde hoy el conjunto de la Benemérita se halla bien cubierto.
Si los equipos se arman de atrás hacia delante, Lobos acertó durante el mercado de verano en la contratación del portero Toño Rodríguez.
El cancerbero con sus actuaciones bajo los tres postes, como la del domingo protagonizando hasta seis salvadas, se convirtió en figura y referente del equipo.
La Manada, a diferencia del Clausura 2018, sí presume de guardameta, lo cual resulta fundamental para concretar la salvación.
¿Recuerda cuánto le costó a Lobos los yerros de Lucero Álvarez, Jorge Villalpando y Francisco Canales durante el Clausura 2018..?
¿Y si se lesiona Rodríguez? Ahí deberá de emerger la figura del peruano Alejandro Duarte, quien el domingo ni siquiera apareció en la convocatoria, pero deberá sí o sí de levantar la mano para pelear por el puesto, en primera instancia para fungir de arquero titular en la Copa con Canales.
En la línea de la defensa se dio un salto de calidad, pues después de cerrar los torneos Apertura 2017 y Clausura 2018 entre los dos equipos más goleados de dichos certámenes, hoy al finalizar el Apertura 2018, La Manada se ubicó en la posición 13 de la tabla de defensivas o goles en contra.
Es decir, se abandonó el sótano de dicho departamento; pero aún hay margen de mejora.
En cuanto a los dos centrales se refiere, vendría bien un relevo para Francisco “Maza” Rodríguez o Michael Orozco.
En las laterales se necesitaría de competencia para el joven Aldo Cruz y Félix Crisanto. El hondureño, por cierto, luce más acoplado al ritmo del futbol mexicano y seguro a la hora de jugar el balón.
A la sala de máquinas de La Manada, el mediocampo, da la impresión de requerir de más generación de futbol o pelotas de gol para Leo Ramos.
¿Se imagina si Ramos, realizador de ocho tantos en nueve partidos, gozara de un creativo a su lado…?
Y en cuanto a la línea de definición se refiere, luce bien blindada con la incorporación del “Tanque” Ramos; aunque al argentino lo conocerán de mejor manera las defensivas rivales el próximo torneo y el equipo requerirá de otros hombres con facilidad hacia el gol.
Palencia y la dirigencia universitaria deberían de apostar por tonificar la zaga central; además de las laterales.
El mediocampo necesita de descaro, imaginación y juego entrelíneas.
Al frente, Leo Ramos demanda de un cómplice con el mismo olfato de gol o asistente.
Todos estos movimientos habrán de hacerse con el objetivo de tonificar y potenciar al equipo, más cuando jugará la copa el próximo semestre.
TRES POSICIONES EN LAS CUALES ACERTÓ LA MANADA
- LA PORTERÍA incorporando a Toño Rodríguez se convirtió en una de las fortalezas del equipo.
- LOS EXTRANJEROS con los hondureños Félix Crisanto y Michaell Chirinos marcaron diferencia, para muestra el partido contra Toluca.
- LEO RAMOS le dio la razón a Palencia cuando el técnico hablaba de la necesidad de un hombre gol para embocar las opciones generadas.
La Manada se convirtió en el club que más se movió en el draft de transferencias previo al Torneo Apertura, ya que adquirió un total de nueve jugadores.
