“Me imagino en el Mundial de Sudáfrica anotando un gol y celebrándolo como nunca”, fueron las palabras de Javier “Chicharito” Hernández meses antes de arrancar la justa en el 2010. Y la nueva incorporación del Manchester United, en aquel entonces, cumplió su palabra no con uno, sino con dos anotaciones en el certamen llevado a cabo en tierras africanas y empezó una escalada de triunfos personales en Inglaterra con el Manchester United.
En el torneo Bicentenario 2010 de la Liga MX se empezó a hablar del hijo de Javier “Chícharo” Hernández, quien catapultaba su carrera como delantero del Guadalajara. En los tres primeros encuentros del certamen, el delantero anotó dos goles en cada uno y en la 5 ya contabilizaba 8. Al final de su participación, antes de viajar a tierras sudafricanas, el “14” del Guadalajara sumó 10 tantos, por lo que se fue como líder de goleo y con las ilusiones intactas de confirmar su valía en el mundial de Sudáfrica .
Sin embargo, Javier Aguirre cometió dos grandes injusticias en Sudáfrica 2010, al relegar a la banca a dos jóvenes que pintaban para cosas grandes y que hubieran podido brillar con mayor intensidad en la justa: el arquero Guillermo Ochoa (América) y el delantero Javier Hernández (Chivas / Manchester United).
Paco Memo vio cómo, al llamar el “Vasco” a Óscar el “Conejo” Pérez a representar a nuestro país, sus ilusiones de ser el portero titular en el torneo se esfumaron por completo, mientras que a “Chicharito” fueron el Guille Franco y Adolfo “Bofo” Bautista quienes lo dejaron plantado en el banquillo y sólo entró de suplente, algo que cargaría en futuros equipos, pese a su grandísima calidad.
Muy tarde se dio cuenta Javier de su error, cuando en el segundo juego del torneo ante Francia, metió a Javier Hernández en el minuto 55 y nueve minutos más tarde, el jalisciense vacunó a los galos en grandioso servicio de Rafael Márquez. Aunque a muchos les pareció que el gol del “Chícharo” se originó en un fuera de lugar, la realidad es que salió centímetros atrás del defensa que lo habilitó, pero lo que realmente valió la pena de la jugada fue la forma de convertir, pues al verse solo, vio que el línea no marcó nada y se enfiló hacia la portería francesa; el arquero Lloris le salió al paso y tras burlarlo y sacarlo de la jugada, definió de primera.
Golazo del “Chicharito” a los franceses, que el delantero tapatío celebró en grande y sus compañeros lo abrazaron como aquellos que arropan a la joya de la manada.