Lobos dio un golpe para mantenerse en la primera división

En dirección a la salvación, Atlas y Gallos se queda

ALLAND JHONNATHAN

  · domingo 25 de febrero de 2018

Foto: Sandro Franco

El mejor juego de la temporada lo dio La Manada en el momento más oportuno. El sábado el conjunto de Rafael Puente se creció ante la presión y dejó herido de muerte a su rival directo por la permanencia al ganarle los dos partidos, seis puntos, del ciclo.

Además, Lobos le sacó provechó a las derrotas de los Rojinegros del Atlas y Gallos Blancos del Querétaro para adelantarles en la tabla de los cocientes.

A continuación, se analizan las claves del triunfo y fin de semana catártico universitario.

INTENSIDAD

En las ocho jornadas pasadas, inclusive en el triunfo sobre Atlas, Lobos careció de vigor.

El sábado, La Manada presumió de intensidad desde el primer minuto, jamás cesó en su intento de marcar a pesar de perderse seis intentos frente al marco contrario antes del primer gol.

Clave para dicho esfuerzo resultó su gran estado físico y la labor del preparador Axel Bierbaum, pues La Manada aguantó 45 minutos de presión alta.

En el segundo tiempo hizo frente al desgaste gracias a los niveles de felicidad alcanzado tras el segundo gol cortesía de Gabriel John Cortez.

Los equipos, también son estados de ánimo.

El sábado, el conjunto de Rafael Puente sin problemas hacía frente a otro tiempo de 45 minutos.

HAMBRE

Como un equipo grande, los universitarios acabaron con su rival a pesar de tenerlo en la palma de su mano.

En el 2-0, Veracruz prácticamente desapareció del terreno de juego, apenas si superó la mitad del campo. Su porcentaje de posesión (43) e intentos a gol (0) explican lo anterior.

Lobos, en cambio, pateó en 27 ocasiones. De sus 27 intentos, 15 presumían dirección de gol.

Tras el tanto de Cortez, La Manada marcó tres más en espacio de 20 minutos: Diego Jiménez al 70’, Jerónimo Amione a los 84’ e Írven Ávila al 90’.

La Manada entendía bien de las repercusiones del juego, no sólo se trataba de llevarse la serie particular contra Veracruz, se trataba de dar un golpe sobre la mesa y herir de muerte al rival.

El propio Memo Vázquez, estratega del Veracruz, admitió al finalizar el partido lo complicado que resultará levantarse.

“Sigo hasta el final del torneo y ya veremos qué sucede partido a partido; pero pasar este momento será lo más importante”.

En cambio, Rafael Puente admitió la importancia del éxito y de lo liberador del mismo.

“(El partido y el resultado) deberían de ser una catarsis, pero sólo nosotros lo haremos posible”.

BRINCAN EN LA PORCENTUAL

La victoria de Lobos se convirtió en oro molido, pues además de vencer y prácticamente sentenciar a al rival directo, se registró en un fin de semana donde también cayeron 1 por 0 los Rojinegros del Atlas ante Rayados y de los Gallos 2-0 con Toluca.

Por lo que Lobos amanecerá en la posición 15 de los cocientes sobre Gallos, Atlas y Veracruz.

EL DATO

La mayor goleada propinada por Lobos en Primera, antes de la del sábado, llegó en La Corregidora de Querétaro al son de 4 por 0.

TRES CLAVES DEL FRACASO DEL VERACRUZ

1 QUEDAN SORPRENDIDOS por la presión e intensidad del rival, quien sorprendió con su parado.

2 NULA REACCIÓN a partir del 1 por 0. Los Tiburones desaprovecharon el medio tiempo para despabilar.

3 JUGARON UN partido más en Puebla y no uno por del descenso.

ÁVILA, FIGURA DEL PARTIDO

El peruano Írven Ávila por fin obtuvo premio a su esfuerzo y labor de sacrificio con el gol, el cual remató la obra y tal vez a los Tiburones Rojos en la Liga MX. El inca corrió la milla, asistió, se mostró peligroso. A Lobos le viene bien su crecimiento y adaptación.