A través de su amor incondicional, los perros nos proporcionan una sensación de bienestar incomparable. Eso lo sabe muy bien la persona que tiene o haya tenido un lomito como acompañante de vida. Pero la muerte es parte de su proceso vital y ¡como duele cuando ya no están!
Superar la muerte de una mascota es difícil, pero te has puesto a pensar, ¿qué pasa con los perros cuando tú o un miembro de su familia fallece?, ¿se darán cuenta?, ¿sentirán tristeza?
¿Los perros experimentan duelo por la muerte de sus seres queridos?
Los perros también sienten dolor y pasan por un duelo cuando alguien de su manada fallece. Y no me refiero a un congénere, me refiero a cualquier miembro de la familia de humanos a la que pertenece y que, para él, es su manada.
Una mascota crea lazos afectivos muy fuertes con la familia a la que pertenece, por tanto, no solo sabe cuáles son los miembros que la conforman, sino que establece una relación en particular con cada uno de ellos, sobre todo con su humano favorito, que es el que lo cuida o con quien pasa más tiempo.
Si un miembro de la familia fallece y no regresa a casa, principalmente su humano favorito, buscará a esa persona por toda la casa a través del olfato y si no la encuentra dejará de comer, estará decaído, menos activo, incluso permanecerá en algún lugar específico de la casa esperándolo (junto a la escalera, en la cochera, en el tapete de la recámara).
El problema es que el perro puede llegar a caer en depresión por la tristeza de perder a un ser querido, porque él no sabe que se murió y puede pensar que lo abandonó. Por eso, las mascotas también necesitan de nuestro apoyo y cariño para superar su pérdida.
El olfato de los perros y su relación con la muerte
Los perros descubren el mundo a través del olfato, su capacidad olfativa está súper desarrollado porque cuenta con alrededor de 250 millones de células olfativas. Para que te des una idea, el ser humano tiene solo 5 millones.
Nuestros lomitos puedan llegar a oler cosas que nosotros ni podemos ni nos imaginamos, como las feromonas, y es a través de ellas que nuestra mascota puede saber si una persona tiene miedo, está enferma o está muerta.
Cuando una persona está enferma o va a morir, segrega hormonas, feromonas o necromonas, según sea el caso, con olores que tu peludo puede percibir. Entonces puede comenzar a mostrar una conducta inusual y más cariñosa, incluso, puede llegar a olfatear una zona concreta del cuerpo de su humano de forma constante y gimotear tras olerla. Esta conducta está relacionada con los cambios químicos que el cuerpo de la persona está experimentando. De hecho, hay perros entrenados para eso, que son utilizados en programas de medicina preventiva.
Sí, los perros pueden oler la muerte. Ellos pueden percibir el olor de un cuerpo sin vida, por eso, lo mejor que le puede pasar a un perro con dueño es que le permitan oler el cadáver de la persona que falleció, así entenderá que no regresará. Lo mismo pasa con sus congéneres.
Cuando la mascota huela el cuerpo sin vida, primero se sorprenderá, se echará para atrás, después aceptará que su humano falleció y sufrirá lo menos posible.
¿Cómo le ayudo a superarlo?
Si la persona muere hospitalizada va a ser una tragedia no solo para la familia, también para la mascota. Hay que ser conscientes de que los perros también tienen necesidades emocionales y lo mejor que se puede hacer es restablecer cuanto antes su rutina.
Si la persona que murió era el responsable de la mascota, lo primero que debes hacer es tratar de entender el duelo y la tristeza del perro e intentar cubrir la atención que esa persona ponía en él. No caer en el error de humanizarlo, sino analizarlo, entenderlo y respetarlo.
Si el perro pasó de la tristeza a la depresión y no come, es momento de llevarlo al veterinario para que lo hidraten, le den vitaminas o algún alimento especial, porque no puede estar sin alimentarse. Las Flores de Bach son una alternativa para contrarrestar el desequilibrio emocional, tanto de los familiares como de la mascota.
Muchos perros caen en una profunda tristeza por la pérdida de su mejor amigo humano, no lo dejes permanecer así, ayúdalo a recuperarse, aprende de él la lealtad y, en memoria de tu familiar, dale un lugar a tu lado y en tu corazón.
