La vida después de haber estado enfermo de Covid-19 es aún incierta a seis meses de detectarse el primer caso a nivel mundial. Los expertos aún desconocen con exactitud la evolución del virus y cuáles son las consecuencias para una persona que tuvo la enfermedad, así como sus riesgos; no obstante, hay una serie de recomendaciones que deben seguir.
María del Rocío Baños Lara, doctora e investigadora en la facultad de Biotecnología en Upaep y directora de investigación oncológica de Una Nueva Esperanza, aconseja que lo primero es realizarse una prueba PCR (Reacción en Cadena de Polimerasa por sus siglas en inglés) después del periodo de aislamiento para saber si el virus ya no se encuentra replicando.
“Puede ser que ya se recuperó, que ya no tiene signos, ni síntomas, pero todavía se detecta virus o genoma del virus en su organismo a través de la prueba de PCR, de ahí la importancia de practicársela por lo menos un mes después del contagio”, afirma.
Una vez que se realice la prueba y esta resulte negativa, ya es segura la convivencia con otras personas; sin embargo se deben mantener los protocolos de salubridad como el confinamiento, la sana distancia, el lavado constante de manos con agua y jabón y toser o estornudar cubriéndose con el codo.
“En realidad todo el mundo está aprendiendo de esta enfermedad al mismo tiempo y no ha pasado un tiempo suficiente para que podamos ver si esta infección hace a las personas más susceptibles a otras infecciones o más susceptible a otras patologías”, advierte.
Además la especialista recomienda también seguir estos lineamientos:
• El contagiado debe usar cubrebocas KN95 para que evitar diseminar el virus, ello aunque ya no presente signos y síntomas del SARS-CoV-2.
• Dormir en habitaciones separadas a las de otros residentes del hogar
• Lavar la ropa y los trastes de manera separada a los del resto de la familia
• Desinfectar todo con cloro.
“Estos cuidados se deben de tener mientras se está recuperando y aun después de ya no observar signos y síntomas, esto mientras no se tenga la prueba de PCR negativa, por lo que el paciente debe de seguir cuidándose como si fuera todavía potencia fuente de infección”, finaliza.