El transporte público es para cualquier persona la extensión de sus pies, tomas un autobús y en cuestión de minutos estás en otro punto de la ciudad, listo para llegar al trabajo, tomar el café, sentarte a leer un libro o en casa para disfrutar de tu familia, de tu novio o ver tu serie favorita.
Decenas de conductores del transporte público se levantan muy de madrugada para comenzar sus jornadas de trabajo, listo para detenerse en cada esquina, cuando el usuario alza la mano en señal de “voy a subir”, y levantar al pasaje.
Los trabajadores del volante deben respetar el reglamento de tránsito, subir o bajar pasaje en lugares autorizados, no exceder los límites de velocidad, entre otros.
En cambio, el pasajero o usuario tiene la responsabilidad de solicitar el ascenso o descenso en un punto autorizado, lo mismo que respetar el clásico “la bajada es por atrás”, sin embargo, en México esa pasa raras veces.
Basta detenerse en un paradero para observar cómo los pasajeros suben y bajan, lo mismo por la puerta delantera que por la puerta trasera. En México, si usted se sube a un microbús, regularmente podrá usar cualquier, sin ningún problema, y con la venia del chofer.
Pero es justo este desorden lo que provocó que una mujer, apodada rápidamente “#LadyTacones, se convirtiera en trending topic en redes sociales por su comportamiento intransigente al mostrar una actitud berrinchuda para que le abrieran la puerta de adelante, cuando el conductor le recordó que bajara por atrás.
La mujer que llevaba un vestido verde, saco negro y zapatillas plateadas, exige al conductor que le abra la puerta delantera para que se baje, con el argumento de que se le rompió el tacón.
Son unas cabro... por eso nos hacen lo que quieren. A él no le cuesta nada abrir su puerta, cuando hay una persona discapacitada la dejan bajar, se me está rompiendo el zapato, no entiendes se le escucha decir a esta mujer, mientras que se escuchan voces de pasajeros que le sugieren que se lo quite.
Muy molesta, la mujer asesta “por eso estamos como estamos en México, nadie se une en apoyo, es un cabrón machista, a él nada le cuesta nada abrirme. Se me está rompiendo esto y me pegaron en el metrobús, estoy lastimada idiota”.
Este hecho sucedió en la ruta que circula sobre Tlalpan en la Ciudad de México y generó tensión en la unidad, lo mismo que abrió fuego en redes sociales, donde las críticas fueron mayormente en su contra.
Alam Brito Delgado (@alam_brito1988)
Campeón, ¿sabes leer? ¿En que momento dice que no quiso parar para que bajara? Se sube por el frente se baja por atrás. Póngase chingon cuando venga a CDMX no le vayan a apachurrar sus cajas de huevo San Juan.
El General Memelas (@GeneralMemelas )
Pues... según tengo entendido, hasta en los humanos, la entrada es por delante, y la salida por atrás, ¿no?
Como ésta, hay millones de analfabetas selectivos, se les dificulta interpretar los símbolos internacionales de prohibición, y/o espacios reservados para discapacitados.
Santiago Hernandez (@sherbec)
No importa que sea hombre o mujer, ni preferencias ni derechos. Lo primero es respetar las reglas, y si la regla es bajar por la puerta de atrás así se hace y no debería der cuestionable. Así como no se cuestiona una luz roja del semáforo etc.
Al final, se sabe que la unidad detuvo su paso y usuarios solicitaron el apoyo de un elemento policial para calmar la situación, quien exhortó a la joven a descender de la unidad para que pudiera seguir su camino.
