Un grupo de colaboradores denunció una serie de despidos injustificados al interior de la planta de Ricolino en Puebla, que se dedica a producir dulces, chocolates y snacks.
Por ello, hicieron una protesta pacífica afuera de la empresa, ubicada en la colonia Los Héroes, en la que pidieron ser reinstalados a sus centros de trabajo debido a que no existen motivos suficientes para darlos de baja.
Sobre esto, la compañía, que pertenece a Mondelez International, emitió su postura, en la que confirmó que un total de 28 personas fueron separadas de sus respectivos cargos.
Lo anterior, debido a que detectaron en ellos diversas irregularidades en sus procesos de trabajo, los cuales violan el código de conducta por el que están regidos a nivel mundial.
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“Regimos nuestros comportamientos por tres valores esenciales que nos distinguen como compañía. Uno de ellos, es hacer lo correcto, y somos muy exigentes al aplicarlo en todas nuestras prácticas y decisiones”, se lee en el documento.
No se dieron más detalles al respecto, con el fin de evitar afectaciones en las investigaciones legales y administrativas que se están realizando en contra de los excolaboradores.
No obstante, se garantizó que durante todo el proceso se apegarán totalmente a la ley en cuanto a los derechos laborales de esas personas, como es el pago de su liquidación.
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“Como compañía, consideramos fundamental ser congruentes con nuestras acciones y reiterar la importancia de que todas y todos nuestros colaboradores conozcan y cumplan nuestro código de conducta en todos los países en los que operamos”, concluyó la empresa.