Bajo el anonimato, taxistas que trabajan en la zona de lacentral camionera CAPU acusaron competencia desleal por parte delos choferes de Uber.
“Es competencia desleal”, señaló uno de los inconformesque aseguró no participó en la agresión que ocurrió este fin desemana en contra de los vehículos de la empresa estadounidense.Sin embargo, las reglas impuestas a los dueños de taxis soninequitativas y por eso existe descontento.
Enlistó que cada año un taxi debe pagar mil 650 pesos porrevalidación a lo que se conoce como control vehicular, mientrasque un Uber menos de 400 pesos. En tanto que la licencia mercantiltiene un costo de 2 mil 285 pesos por cinco años y con examentoxicológico, pero de chofer particular 2 mil 130 pesos si espermanente y si no, mil 55 pesos por cinco años, sin examen, deacuerdo con los costos de la Secretaría de Infraestructura,Movilidad y Transportes.
Asimismo, añadió que un taxista debe tomar un curso que tieneun valor de mil 800 pesos y para un conductor de Uber eso no esobligatorio, además, ahora estos últimos cobran en efectivocuando todos los pagos tendrían que ser de maneraelectrónica.
Por otro lado, los vehículos de la compañía estadounidensecontinúan ingresando a la Central Camionera a dejar su pasaje.Miguel Ángel Pérez, chofer de Uber, aseguró que sí tiene miedode sufrir una agresión como la de sus compañeros. “Por eso dejomi pasaje y me voy rápido”, explicó. En un lapso de 10 minutospor lo menos seis vehículos particulares que trabajan con laempresa estadounidense dejaron clientes.
La madrugada de este sábado alrededor 40 presuntos taxistas delas centrales “Taxi Cero” e “Ignacio Ramírez” atacaroncon bates y tubos siete unidades de la firma de servicio porInternet, cuando estaban estacionadas en inmediaciones de laCentral de Autobuses de Puebla.
José “A” explicó que él tiene alrededor de 30 añostrabajando en la CAPU y se entiende la molestia de algunos de suscompañeros taxistas. “Que de buenas a primeras vengan”. Susganancias, expuso, se han reducido de manera importante con lallegada de la trasnacional y explicó que a pesar de que no estápermitido hacerlo, los automóviles de Uber se estacionan alrededorde las 16:00 horas en una de las calles aledañas para hacer“base”. “Y luego son prepotentes”, acusó.
Comentó además que los taxistas deben comprar los permisos ala Secretaría de Infraestructura cuando ahora cualquier personaque tenga un automóvil puede ser Uber sin tomar un curso decapacitación. “Se estacionan a media calle, en doble fila, nosaben ni manejar”, indicó.
Resultado de la agresión a los choferes de Uber este fin desemana, uno de ellos fue golpeado por lo que incluso fue a dar alhospital, los afectados aseguraron que tres días antes otroconductor también fue agredido por la zona y de igual formarequirió de atención especializada.