El asesinato de cuatro policías estatales en San Francisco Terrerillos, en Chignahuapan, no quedará impune, afirmó el gobernador Sergio Salomón Céspedes Peregrina, quien llamó a los ayuntamientos municipales a reportar cualquier incidencia o hecho que los rebase en materia de seguridad, ya que en ese municipio no hubo algún informe previo por parte de la autoridad.
“No descansaremos hasta hacer justicia y asegurar que su sacrificio no haya sido en vano, les aseguro que no habrá impunidad y daremos con los responsables”, expresó el mandatario poblano durante una rueda de prensa, en la que también dio a conocer que el Estado ha ofrecido acompañamiento a los familiares de las cuatro víctimas.
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Céspedes pidió a los ayuntamientos que asuman su responsabilidad en la seguridad pública y rindan informes de situaciones de delitos graves o en las que se vean rebasados, ya que en el caso de Chignahuapan no había habido ningún tipo de pronunciamiento por parte de la autoridad a pesar de que han ocurrido diversos eventos.
“También la omisión es delito y es muy importante que revisen perfectamente bien cuál es la productividad que se tiene en las policías municipales. Les hemos pedido dos cosas: que atiendan la flagrancia y que atiendan la prevención del delito, avisar a tiempo y mandar informes a tiempo (…) presidentas y presidentes municipales saben que tienen nuestro respaldo pero si no asumen la responsabilidad de informarnos que está pasando en sus municipios ahí están las consecuencias”, acotó.
Detención de un sujeto detonó la agresión
El Secretario de Seguridad, Daniel Iván Cruz Luna, detalló que aproximadamente a las cuatro de la mañana del pasado domingo los elementos detuvieron a un hombre que se transportaba en una camioneta color negro, misma en la que transportaba equipo táctico y estrellas de metal conocidas como ponchallantas.
Enseguida, indicó, cuando se retiraban de la comunidad fueron interceptados por otros vehículos con sujetos que realizaron detonaciones de arma de fuego y dicho enfrentamiento dejó saldo de al menos cuatro personas muertas, que pertenecían al grupo de agresores.
Cruz Luna señaló que aunque los efectivos solicitaron refuerzos, hubo un momento en el que se vieron rebasados porque llegaron más personas de esa región a atacarlos y fue ahí cuando murieron los cuatro policías y dos más resultaron heridos.
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El Secretario refirió que aunque los propios agresores retiraron los cuerpos de las personas que murieron en el enfrentamiento con la policía estatal, durante los operativos implementados se localizó otro cadáver al interior de una camioneta color blanco.
