El trabajo en clase debe planificarse, organizarse y medirse: profesor BUAP

“Los cursos en línea y el uso de plataformas se pusieron de moda, pero muy pocos entendimos el mensaje”.

Alan A. Luis Diego | El Sol de Puebla

  · jueves 14 de mayo de 2020

Foto: BUAP

Ser docente no es solo una profesión, sino una forma de vida. De acuerdo a José Gaspar Rodolfo Cortés Riveroll, académico de la Facultad de Medicina de la BUAP, enseñar alguna disciplina ha cambiado tanto en los últimos años debido a que los alumnos exigen cada día más. Además, con el confinamiento por el Covid-19 obliga los estudiantes a pasar más tiempo en casa y eso replantea la forma de estudiar.

“El alumno exige cada vez más, por lo que los profesores no pueden quedarse al margen, aún con una gran vocación. El trabajo de clase debe planificarse, organizarse, ser impartido y finalmente evaluado para saber si tuvo la repercusión deseada. Puedo presentar el mismo conocimiento del año anterior, pero cada vez con un análisis distinto y mejorado”, comentó el catedrático de 37 años de edad.

Rodolfo Cortés Riveroll, doctor en Historia de la Medicina, dijo que el tiempo que profesores y alumnos pasan en el aula es un pretexto para estudiar.

“En clase se plantean problemas, dudas, alcances y metodologías que los estudiantes deben encontrar con el estudio sistematizado y habitual. Cuando ellos aprenden esta metodología, podemos estar seguros que nunca quedarán dudas sin respuesta o problemas sin resolver”.

De acuerdo con la UNESCO, mil 370 millones de niños y jóvenes en 138 países se han visto afectados con la pandemia global por COVID-19, por lo que la escuela y el hogar se convirtieron en el mismo lugar. Lo cual, implica para los profesores que deben diseñar lecciones en línea funcionales y basadas en el aprendizaje tecnológico.

“Los cursos en línea y el uso de plataformas se pusieron de moda, pero muy pocos entendimos el mensaje”.

En la tarea de incorporar estrategias para un aprendizaje virtual, a la par de dar una mayor flexibilidad de estudio, la BUAP pretende ofertar 926 asignaturas en línea, cifra que representa 20 por ciento del total de la currícula del nivel superior. Con ello, se busca maximizar el aprovechamiento de las herramientas tecnológicas.

“Hace cuatro años, la Academia de Historia y Filosofía de la Medicina, de la cual es miembro, diseñó el Curso Masivo Abierto en Línea (MOOC), de 45 horas, “Historia de la Medicina en el siglo XIX”. Es un proyecto de Comunidades Digitales para el Aprendizaje en Educación Superior (Codaes), en colaboración con profesores de Historia de la Medicina de la UNAM y de la Universidad Autónoma Benito Juárez de Oaxaca”.

Para Rodolfo las tecnologías no surgen espontáneamente, sino que son ideadas y realizadas por maestros con el fin de llegar a más alumnos de los que se reúnen en un aula.

“Un alumno frente a una computadora realizando cualquier tarea siempre estará consciente de que hay un profesor que lo diseñó y lo acompañará”.