El estado de Puebla regresó a la “nueva normalidad” en medio de las restricciones que el Gobierno del Estado alargó hasta el próximo 15 de junio y el desacato de comerciantes que no aguantaron más días cerrados y este fin de semana empezaron a abrir sus puertas, a pesar de ser considerados como no esenciales.
El crecimiento de contagios por coronavirus en Puebla y las diferencias de criterios entre el gobierno federal y estatal, provocó una variación en las fechas de regreso a las actividades, pues mientras a nivel nacional este lunes concluye la jornada de sana distancia y se retoman algunas actividades, en el estado el regreso será hasta el 15 de junio de forma escalonada.
Estas diferencias fueron reconocidas por el propio gobernador de Puebla, Luis Miguel Barbosa Huerta, quien dijo que, de acuerdo con los propios datos de la Federación, Puebla se encuentra en semáforo rojo como la mayor parte de los estados del país y por ello se debería reconsiderar la reapertura de actividades.
PLAN PARA EL REGRESO
De acuerdo con el Plan de Reactivación Económica que anunció el gobernador, será en 15 días cuando puedan reanudar sus actividades la industria automotriz, de la construcción y minera, además de algunos comercios y restaurantes con servicio en terrazas.
En el caso de la industria automotriz, construcción y minera se informó que el regreso sólo será con el 30 por ciento de la capacidad en los centros de trabajo para permitir la sana distancia y prevenir nuevos brotes de contagios por Covid-19.
Esta decisión provocó que la empresa alemana Volkswagen abriera la posibilidad de explorar vías jurídicas para su regreso, tras exponer las afectaciones que puede traer la detención de actividades en Puebla en la cadena de suministro a nivel nacional e internacional.
La Cámara Nacional de la Industria de la Transformación (Canacintra), también advirtió riesgo de que se cancelen contratos y cierren empresas al retrasar la reapertura dos semanas más, cuando a nivel nacional el gobierno federal dio luz verde para reactivar estos sectores a partir del 1 de junio.
En el caso de los restaurantes, Barbosa Huerta permitió que a partir del 15 de junio puedan abrir sus puertas para el consumo en terrazas con un aforo no mayor al 30 por ciento de la capacidad de cada establecimiento.
Al respecto, la presidenta de la Cámara Nacional de la Industria de Restaurantes y Alimentos Condimentados (Canirac) en el estado, Olga Méndez Juárez, cuestionó el futuro de aquellos negocios que no cuentan con terrazas y que representa el 40 por ciento de sus afiliados, sin que hasta la fecha exista una respuesta.
MEDIDAS DE RESTRICCIÓN
El manejo de la pandemia en la entidad se ha caracterizado por una serie de decretos emitidos por el gobierno estatal para restringir la movilidad y el flujo de personas en las calles, entre los que destaca el “Hoy no circula”, uso obligatorio de cubrebocas, el confinamiento de trabajadores de grupos vulnerables y la prohibición de venta de bebidas alcohólicas en botellas abiertas, entre otros.
Sin embargo, ante la falta de sanciones en la mayoría de ellos, la ciudadanía no ha respetado estas disposiciones, como ocurrió con la instalación de tianguis y mercados ambulantes que, en muchos casos, nunca detuvieron su actividad.
Sólo en el caso del programa “Hoy no circula” se instruyó llevar al corralón a los vehículos que salgan a las calles los días que no le tocan.
En el caso del transporte público también se ordenó reducir la capacidad de las unidades para garantizar una sana distancia, sin embargo, en los hechos, la demanda del servicio en horas pico hicieron imposible el cumplimiento de esta disposición.
DESACATO DE COMERCIANTES
Este fin de semana, cerca de 400 comerciantes del Centro Histórico reabrieron sus puertas a pesar de no ser considerados como actividades esenciales.
El presidente del Consejo de Comerciantes del Centro Histórico, José Juan Atala Vázquez, argumentó que esta reapertura no era con el fin de desobedecer las instrucciones de las autoridades, sino por la necesidad de los comerciantes de llevar un sustento digno a sus casas.
A la par de la reapertura de negocios, el flujo de gente en el primer cuadro de la ciudad también aumentó, pues a través de recorridos se pudo apreciar a la gente circulando por las calles y muchos de ellos sin cubrebocas.
A la reapertura de comercios en este fin de semana, se suman aquellas empresas que nunca cumplieron las recomendaciones de las autoridades sanitarias y permanecieron abiertas, como ocurrió con Elektra, Coppel, Woolworth y zapaterías de diferentes cadenas como Price Shoes y Pakar.
