HUAUCHINANGO, Pue.- El pintor y escultor Raúl DomínguezLechuga se desmarcó de la obra denominada “Danza de los Abanicosen honor al señor Jesús en su Santo entierro”, recientementeinstalada en el espacio donde estaba el emblema de laadministración federal “Mover a México”.
Debido a que el artista es sordo mudo, a través de su esposa,Graciela Castelán Marroquín, dio a conocer su inconformidaddebido a que ha recibido “varios wats” en donde algunaspersonas le dicen que no les gustó el monumento a la danza quetambién es conocida como “guardianes de Santo Entierro o SantoEntierrito”.
Graciela Castelán Marroquín indicó que en algún momentomostraron algunos bosquejos al presidente municipal GabrielAlvarado Lorenzo y a las autoridades eclesiásticas, como altitular del arzobispado y al párroco José Gustavo Corona, sobrela manera en que podría quedar un monumento a la misma danza.
Cuando se hizo esta manifestación, Raúl Domínguez Lechuga,mostró un cartel donde estaba plasmado un dibujo de una “cruzatrial, con tres danzantes de diferentes tamaños al pie deésta”.
Sin embargo, tanto el artista como su esposa, reconocieron queen ningún momento les manifestaron, ni la autoridad municipal, nireligiosas, que estaban interesados en su trabajo, porque nuncahubo una intención de contratar sus servicios.
Por otro lado, la pareja también expresó que no estabanacusando a nadie de plagio, por haber colocado a un danzante de LosAbanicos, sino solamente expresar el descontento por la manera enque quedó el monumento: en una posición inapropiada y con untraje que no corresponde al original.
Señalaron que para no causar mayor molestia en el artista (suesposo), hubieran colocado otra imagen en ese lugar, “no séotro, tal vez un Mickey Mouse o un personaje de Huauchinango, perono esa imagen que ya se le había ocurrido a Raúl”.
Al ser Raúl Domínguez una persona con capacidades diferentes,pidió que se le dé trabajo, que se le tome en cuenta pararealizar otros trabajos de este tipo.
EL AUTOR BERNARDO LUIS LÓPEZ
Al momento de la develación del monumento a la “Danza de losAbanicos en honor al señor Jesús en su Santo entierro” sepresentó al artista que la diseñó, el poblano Bernardo LuisLópez Artasánchez, quien con el fin de realizar una figuraapegada a los orígenes de la danza, consultó al párroco JoséGustavo Corona, quien proporcionó algunas fotografía históricasde los danzantes de hace 40 o 50 años.
Bernardo Luis señaló que todas las formas son perfectiblesasí como las danzas: “por ejemplo, a mí me dijeron que antes nose zapateaba en el baile de los Abanicos y que desde hace unos 5años a la fecha ya se hace”, recordó.
Explicó que la obra del Danzante de los Abanicos tiene losbrazos abiertos, aunque en la danza nunca se abren, porque estádando la bienvenida a todos los visitantes de Huauchinango. Ademásde que también son el cierre de las “tres cruces: una la de latorre de la iglesia vieja de Santo Entierro; la segunda, la de lagran cúpula de la parroquia a Santa María La Asunción y latercera es el danzante con los brazos en cruz pero sin dolor, sinode gusto dando la bienvenida”.
Refirió que a las esculturas se les incluyen accesorios “comolas mujeres lo hacen con los aretes, con los que expresan osimbolizan algo, en este caso la sonaja simboliza la música oritmo”.
El escultor señaló que él es de donde trabaja “por eso hoydigo que soy de Huauchinango, porque llevo casi un semestreviniendo y la gente es hospitalaria, yo me voy con eso”. Terminódiciendo que la obra con la que más se siente identificado por loque le puso alma es “El danzante de los abanicos”.
