[Entrevista] Guadalupe Grajales defenderá autonomía de la BUAP

La primera aspirante a ocupar la rectoría de la universidad de Puebla también atenderá la estabilidad laboral y permanecía del alumnado

Maricarmen Hernández | El Sol de Puebla

  · lunes 2 de agosto de 2021

La primera aspirante a ocupar la rectoría de la BUAP afirma que defenderá la autonomía universitaria, atenderá la estabilidad laboral y permanecía del alumnado. Foto: Erik Guzmán | El Sol de Puebla

Guadalupe Grajales y Porras, quien recientemente dejó la Secretaría General de la Benemérita Universidad Autónoma de Puebla (BUAP) para destaparse como candidata en el proceso de elección del nuevo rector de la Máxima Casa de Estudios, compartió que de ganar el proceso, enfocará sus esfuerzos para mantener la autonomía de la universidad que, desde hace varias décadas, diversas figuras políticas han querido trastocar.

En entrevista con El Sol de Puebla la académica compartió que, además de estar adscrita al Instituto de Ciencias Sociales y Humanidades, poseer la licenciatura y maestría en Filosofía, y ser candidata a doctor en esta misma línea académica por parte de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), ahora se convierte en la primera aspirante mujer para ocupar la rectoría que tendrá su relevo en octubre.



Guadalupe Grajales enfatizó que de llegar al cargo pondrá especial atención en tres puntos medulares: la estabilidad laboral de los académicos, atender la admisión y permanecía del alumnado, y desaparecer la figura del “dar de baja” a los alumnos que lucharon por ganar un lugar en la Máxima Casa de Estudios.

¿QUIÉN ES GUADALUPE GRAJALES Y PORRAS?

Su nombre completo es María del Socorro Guadalupe Alicia de la Inmaculada Concepción Grajales y Porras, sin embargo, entre sus colegas, estudiantes y amigos es conocida como Lupita.

Tras ser alumna de la Máxima Casa de Estudios logró convertirse en docente y ocupar diversos cargos de elección, de los que agradece recibir el apoyo de los docentes y alumnos.

“Siempre he sido Lupita y soy 200 por ciento BUAP. Entré a estudiar la licenciatura en el 68 y me tocó el movimiento estudiantil que transformó a México y a todos nosotros. Sobre todo a los estudiantes que nos tocó vivir esa transformación.

Del 68 al 72 hice mi carrera y me gradué inmediato. Yo soy de la cuarta generación de la facultad de Filosofía” compartió.



Recordó que en aquel momento el grupo oferente de la licenciatura era fundamentalmente un grupo que venía de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) , incluso recordó que el director el primer director de la escuela fue el maestro Joaquín Sánchez Macgégor, también filósofo.

“Años más tarde la escuelas se vio en la necesidad de contratar a sus propios egresados, entonces yo había obtenido mi grado el 28 de febrero de 1972 y el doctor me invitó a colaborar dando clases, desde entonces soy profesora de nivel profesional, es decir, de nivel superior porque de medio superior ya era yo desde el 69, como te decía, éramos estudiantes pero la universidad necesitaba profesores y echó mano de sus propios estudiantes”, compartió.

¿POR QUÉ SER RECTORA DE LA BUAP?

Tras formarse en la BUAP y tener una participación activa en los procesos políticos de la institución, ahora desea continuar con esta línea participativa, pero ahora desde la rectoría.

“Mi vida académica siempre ha estado ligada a mi actividad política dentro de la universidad. Por ejemplo, desde que yo era estudiante, era miembro del Consejo Técnico (...) después, asumí la Coordinación del colegio y al mismo tiempo era representante de los profesores (...) después fui Consejera Universitaria y me tocó ser protagonista de un movimiento tan importante como fue la generación del Nuevo Marco Normativo de la Universidad”, compartió.



Bajo el contexto de su recorrido académico, -primero como alumna, después cómo docente y posteriormente como Consejera Universitaria- es que ahora desea atender el espíritu de defender la autonomía de su alma máter.



“Digamos que, atendiendo al espíritu, antes que nada es defender la autonomía de la universidad por encima de cualquier cosa: por encima de cualquier interés, encima de cualquier partido, encima de cualquier grupo de gobierno, eso es lo que ha propiciado esta designación”, compartió.

Destacó que para lograrlo, además de la participación de los alumnos y docentes, el trabajo de los administrativos también es importante para que las actividades en las que tiene representación la universidad marchen con efectividad. “Sin los administrativos no podríamos funcionar”, destacó.

En este mismo contexto señaló que su trayectoria en la universidad siempre ha sido de investigación, docencia y actividad política, “siempre lo digo con mucho orgullo: yo he ocupado cargos de elección, siempre. Mi último cargo de elección fue como coordinadora de posgrado en Ciencias del Lenguaje, mis compañeros me eligieron en varias ocasiones. Para mí eso es un orgullo, su reconocimiento a mi trabajo como coordinadora y como compañera de ellos.

Esa es mi historia, una historia entretejida entre actividad académica y actividad política, y no las concibo separadas, de ninguna manera”, comentó.

¿QUÉ HARÍA POR LA UNIVERSIDAD EN CASO DE LLEGAR A LA RECTORÍA?

“He mencionado mucho la estabilidad laboral de los docentes (...) pero hoy me quiero referir también a lo que a mí me llama la atención, es decir, de algunos reglamentos de la universidad que se refiere a la regulación de la admisión y de la permanencia del alumno.

Yo como maestra y como Coordinadora de Posgrado me he percatado de una figura en la legislación referida a los estudiantes que se llama ‘dar de baja’. A mí me parece que es una figura que debería desaparecer” refirió.



Y es que para la aspirante a la rectoría, el ‘dar de baja’ no resuelve nada, al contrario, agrava un problema “porque si el alumno no pudo aprobar las materias en las cuales se inscribió, debe tener oportunidades. La posibilidad de entrar es como una competencia feroz y, ya que entran y ya que están cursando la licenciatura o la prepa, los dan de baja, eso no está bien, y voy a citar al licenciado López Obrador, hay que atender a las causas”, consideró.

¿CUÁL ES SU OPINIÓN SOBRE LA RELACIÓN ENTRE EL ACTUAL RECTOR Y EL GOBERNADOR?

Aunque la catedrática no quiso dar un calificativo como tal sobre la relación que actualmente mantienen el rector del la BUAP, Alfonso Esparza Ortíz, y el gobernador del estado, Miguel Barbosa Huerta, dijo que se debe estará abierto a cualquier posibilidad de colaboración.

“Lo que yo digo es que estas autoridades deben establecer convenios de colaboración y convenios de participación conjunta en la resolución de problemas que se pueden presentar... mantener acercamientos que permitan la colaboración... trabajar por proyectos de tipo social; es no darle la espalda a ninguna posibilidad de colaboración que sea en beneficio de los jóvenes, de los poblanos en general y también de los de otros estados”, finalizó.