Dos lenones que eran requeridos por la Corte Federal de Nueva York, fueron detenidos este fin de semana en Puebla, en la junta auxiliar de San Felipe Hueyotlipan, por personal de la Agencia de Investigación Criminal (AIC), adscrita a la Procuraduría General de la República (PGR). Hace casi un año, en marzo de 2017, también en la capital poblana cayó uno de los diez delincuentes más buscados por el Servicio de Aduanas e Inmigración de Estados Unidos (Immigration and Customs Enforcement ICE), luego de que sobre él pesaran acusaciones por el delito de delincuencia organizada, trata de personas y asociación delictuosa para transportar a menores con fines de explotación sexual.
La PGR a través de la Subprocuraduría Jurídica y de Asuntos Internacionales (SJAI), dio a conocer que personal de la AIC cumplimentó una orden de aprehensión provisional con fines de extradición internacional en contra de José “N” y Rosalío “N”, quienes eran requeridos por la Corte Federal de Distrito para el Distrito Este de Nueva York, por los delitos de asociación delictuosa, tráfico de personas, trata de personas y operaciones con recursos de procedencia ilícita.
A decir de la dependencia, las investigaciones preliminares señalan que los hoy detenidos, probablemente son integrantes de una organización familiar dedicada a la trata de personas con fines de explotación sexual que opera en los estados de México, Tlaxcala, Puebla, Oaxaca, Sonora y la ciudad de Nueva York, en los Estados Unidos.
Los dos hombres fueron asegurados en la junta auxiliar de San Felipe Hueyotlipan, Puebla, para ser puestos a disposición del Juez de Distrito Especializado en el Sistema Penal Acusatorio del Centro de Justicia Penal Federal en la Ciudad de México, con sede en el Reclusorio Sur, en atención a la solicitud de extradición.
CAE UNO DE LOS 10 MÁS BUSCADOS POR LA ICE
El 4 de marzo de 2017, Saúl Romero Rugerio, originario de San Miguel Tenancigo, Tlaxcala, población mejor conocida como la cuna de la trata de personas, fue capturado en la Ciudad de Puebla gracias al trabajo de los elementos de la Policía Federal y la Interpol México.
Romero Rugerio, era uno de los líderes de una banda tlaxcalteca que enganchaba a mujeres de Puebla, Tlaxcala y el Distrito Federal a través de supuestas relaciones de “noviazgo”, mientras que en la frontera con Sonora, el modus operandi utilizado con salvadoreñas y guatemaltecas, era engañarlas con ofertas de trabajo en Estados Unidos, prometiéndoles incluso pagarles el “coyote”. Una vez que las víctimas caían en las redes de esta banda delincuencial, eran prostituidas en Alabama, Carolina del Sur, Florida, Georgia, Texas y Nueva York, según lo dado a conocer en su momento por la Comisión Nacional de Seguridad Nacional (CNS).
En ese entonces, para quienes dieran información que ayudara a la captura de Saúl, existía una recompensa de 15 millones de pesos. Tras su arresto, el presunto lenón fue llevado ante el Ministerio Público de la Federación con sede en la ciudad de Tlaxcala también para su extradición.
