El monitoreo a través de sus centrales y la organización que tienen entre compañeros del gremio taxista a través de grupos de WhatsApp, son las únicas formas con las que trabajadores del volante han hecho frente a la delincuencia. Gracias a esas dos tácticas, algunos han sido salvados de los delincuentes o incluso, han podido recuperar sus vehículos al poco tiempo de haber sido robados.
Asimismo, consideran como “puntos rojos” la zona del mercado Hidalgo y San Francisco Totimehuacan, donde, dicen, continuamente son atracados.
Los choferes, entrevistados por este medio, aseguran que además salen de casa todos los días “encomendándose a Dios” y únicamente apoyándose de los compañeros del gremio.
Tal es el caso de Edgar -nombre ficticio utilizado por seguridad de la víctima-, quien en junio del presente año, cerca de las 21: 30 horas, tomó un servicio del Bulevar 5 de Mayo en la zona de San José, hacia el Centro Escolar Niños Héroes de Chapultepec (CENHCH), en la avenida 13 Oriente entre las calles 12 y 14 Sur.
Aquel día, el pasajero, un sujeto de entre 40 y 45 años de edad, robusto, de aproximadamente 1.65 metros de altura, tez blanca, cabello quebrado y cubrebocas, se subió y se sentó en el asiento delantero de lado del copiloto. Todo iba bien hasta que llegaron al destino indicado, donde el delincuente sacó un arma de fuego tipo escuadra para colocársela en la cabeza a su víctima y así obligarlo a entregar tanto su teléfono celular, como las llaves de su unidad de alquiler, para después huir en la misma.
Tras lo sucedido, el agraviado de 58 años de edad y 26 como taxista, pidió apoyo a sus compañeros a través de grupos de WhatsApp, incluso, al notar la presencia de una patrulla municipal solicitó su ayuda, sin embargo, los oficiales únicamente le dijeron que acudiera a presentar su denuncia sin ni siquiera boletinar las características del taxi, ni subir al afectado al vehículo oficial para hacer el intento de buscar y localizar la unidad robada.
Después de una hora y con la coordinación de varios de sus colegas, el taxi fue ubicado cerca de la zona del robo.
A decir del entrevistado por El Sol de Puebla, este sujeto ha cometido varios atracos en agravio de taxistas, precisamente por la zona del Centro Histórico, bulevar 5 de Mayo y el CENHCH.
Tras situaciones como la anterior y debido a que consideran que los delincuentes se encuentran en cualquier lugar y a cualquier hora del día, los trabajadores del volante, todos los días, dicen, salen de casa “encomendándose a Dios y únicamente apoyándose de los grupos de WhatsApp con otros colegas” o bien, del monitoreo que cada 5 ó 10 minutos les realizan vía radio desde sus centrales en cuanto toman un servicio y tras lo cual indican su destino.
TAXISTA ES CONFUNDIDO CON ASALTANTE
Otro caso es el de César, un hombre de 60 años de edad que tras dedicarse a la carpintería y no tener los ingresos suficientes, hace 15 años tuvo que optar por manejar un taxi; sin embargo, jamás imaginó que su pasajero iba a ser víctima de un intento de asalto y él detenido por ese hecho en el que no tuvo nada que ver.
En este caso, César, de igual forma nombre ficticio por seguridad del declarante, narró que el pasado 6 de mayo acudió a la zona de Plaza San Diego, donde llevó a un hombre que se citó con un supuesto cliente que le compraría unas cajas con botellas de vino; sin embargo, al no llegar nadie, el pasajero pidió al conductor del taxi que lo regresara a la Capu; en ese instante, un sujeto que iba vestido de civil, acompañado de su hermano y cuñada, llegó al sitio, donde el primer varón en mención sacó una supuesta credencial de la Policía Estatal y enseguida manifestó que haría una revisión porque se encontraban en un operativo por la venta de alcohol adulterado.
Al notar algo extraño, el taxista trató de huir de la zona, pero fue seguido y agredido, de tal forma que cristales del auto terminaron rotos.
Por lo anterior, al ver una patrulla de Vialidad solicitó ayuda. Los oficiales trasladaron a todos los involucrados al Complejo Metropolitano de Seguridad Pública en Cuautlancingo.
Después de comprobar su inocencia, César fue liberado, mientras que el supuesto policía estatal permaneció detenido cerca de dos meses, sin pagar ningún tipo de daño al taxista, quien tuvo que conseguir prestado y pagar 10 mil pesos por concepto de arrastre y cobro de piso para poder recuperar su vehículo del corralón, donde incluso su taxi fue vandalizado.
.jpeg "RUTAS ASALTADAS (1).jpeg")
El hombre de 60 años señala que la inseguridad está con la misma policía y la falta de justicia por parte de las autoridades, pues lejos de conseguir un ingreso para su familia, fue víctima de un abuso. Por si fuera poco, este hombre, solo ocho días después de haber recuperado su unidad, fue asaltado en la zona del mercado Hidalgo.
La víctima indicó que para los taxistas, las inmediaciones de dicho mercado al igual que la zona de San Francisco Totimehuacan, son los lugares donde más han asaltado a compañeros del gremio.
