Entre banderas, papel picado y luces tricolor, ciento ochenta personas vivieron una noche mexicana al estilo Camino Real que, para celebrar a México, adaptaron sus instalaciones para simular una feria en la que hicieron gala los puestos de comida y los juegos mecánicos.
Los comensales arribaron al recinto en familia o con amigos y vestidos de acuerdo a la ocasión. El lugar estaba completamente decorado en verde, blanco y rojo, y ambientado con música mexicana.
Tostadas, chalupas, taquitos, tortas, churros, arroz con leche y pozole verde, blanco y rojo, fueron algunos de los alimentos que se encontraban en los puestos de comida dispuestos alrededor del lobby, donde también había aguas frescas, café de olla y atole para acompañar.
Grandes y pequeños se divirtieron con los juegos de feria como tiro al blanco, canicas y lotería, que contaban con premios para los ganadores; pero la sensación fueron el toro mecánico y el carrusel, que robaron sonrisas al por mayor.
La hora azul llegó con el trio Los Cisnes que, entre tequila y mezcal, amenizó la sobremesa de los comensales quienes llegado el momento, dieron El Grito a todo pulmón, que fue proyectado en una pantalla gigante.
Pero la fiesta apenas comenzaba porque para celebrar el orgullo de ser mexicanos, el mariachi Estrellas de México, se hizo presente al Son de la Negra y lleno de alegría la Noche Mexicana que terminó avanzada la madrugada porque los asistentes se mantuvieron en feliz convivencia y bailando con música de dj unas horas más.