Ale y Kiko
Nos conocimos por casualidad, por un correo electrónico corporativo que recibí en la multinacional en la que los dos trabajamos, él en España y yo en Puebla. Me causó mucho interés su apellido porque es igual al mío, así que intercambiamos una serie de correos y posteriormente nos comunicamos por medio de las redes sociales. Todo comenzó con una linda amistad, pero pronto nos dimos cuenta de que había surgido algo más que eso.
Poco después del primer contacto, él quiso ir a Puebla a conocerme, y dos meses después yo fui a España a conocerlo un poco más y a conocer a su familia. Cuatro meses después me pidió que me fuera a España a vivir y me pidió matrimonio. Todo fue muy rápido, pero yo estaba segura de ese paso tan importante que iba a dar. El amor y la confianza surgieron desde el inicio.
Nos casamos 8 meses después. Ahora, tras 6 años me doy cuenta de que fue la mejor decisión de mi vida, hemos formado una bonita familia y estamos encantados. Dejar tu tierra, tu familia, los amigos, tu vida, es muy difícil, pero cuando hay un buen motivo para hacerlo, todo vale la pena.
Carol y Fabián
En agosto del 2013 yo llevaba una clase, inglés online, en la clase hubo un compañero que con su pronunciación me hizo reír un par de veces, por eso casi al terminar le envié una carita feliz, a la cual él respondió con otra igual y añadió un “hola... ¿de dónde eres?; las preguntas iban y venían, nos quedaron pocos minutos y me envió su correo al que yo respondí con el mío. Decía no voy a escribirle. Y me escribió. Nos buscamos en Facebook. Luego hablamos por ahí... a las semanas ya hablábamos cada vez más tiempo... cada vez era más difícil dejar de hablar.
Fue algo que me asustó al principio. Sin embargo, por esos arranques de la vida decidí que viajaría. ¿Qué tan lejos podía ser Puebla, México? Una amiga de escuela me recordó que de niña siempre quise ir para allá, por la virgen de Guadalupe. Entonces me convencí y como me dijo mi ahora esposo: ese día 4600 km. (desde Perú) se hicieron nada. ¡¡Estábamos juntos!! Y cada vez sería más difícil que no fuera así.
El 11 de mayo del siguiente año nos casamos… y sí, decían que era una locura que no duraría un año… ya casi cumplimos 4. Tenemos un hermoso hijo de un año y estamos felices, nuestro amor continúa, ¡aprendemos cada día el uno del otro!
María y Rob
En diciembre del 2008 entré a una red social popular en ese entonces (Tagged). Una amiga me había insistido en inscribirme y lo hice. Ahí puedes ver fotos y decir SÍ a las personas que te gustaría conocer, si la otra persona da SÍ se inicia una conversación. Así conocí a Rob, en una pequeña foto. Platicábamos mucho, teníamos muchos intereses en común. Después hablamos por teléfono. Un día decidimos conocernos; fue un gran paso para los dos.
A Rob le había ido mal conociendo gente en internet y a mí no me agradaba mucho la idea de conocer gente de esa manera; la realidad es que es un riesgo conocerse así. Pero nos conocimos en persona un domingo después de Navidad, ¡fue increíble!, ambos éramos quienes dijimos ser y habíamos sido totalmente auténticos en nuestras conversaciones anteriores.
Fuimos a Sanborns y platicamos sin parar. Tiempo después me dijo Rob que le parecía que yo había sido demasiado reservada; años después cuando entró a trabajar como docente, mientras íbamos camino al trabajo me dijo: “Ya entendí por qué no publicas fotos tuyas y casi no pones información en tus perfiles; es por los alumnos”.
Pasamos varios años saliendo, no mucho tiempo después dejé de vivir en casa de mis padres, me visitaba todos los días, a veces pasaba las noches en mi casa y poco a poco comenzamos a vivir juntos, aunque se hizo oficial cuando terminó el contrato de renta y me mudé a su casa.
Así pasamos varios años felices, compartimos responsabilidades, alegrías, diversiones, tristezas y hasta las deudas. Construimos un hermoso proyecto de vida, nos casamos y ahora tenemos una hermosa familia que nos hace los papás más felices del mundo. Creo que somos tremendamente afortunados por poder despertarnos con un beso y un te amo seguido de los abrazos de nuestros 3 hijos a los cuales amamos con todo el corazón.
Ricardo y Konny
Nos conocimos en el año 2003 en la página de chats terra.es, yo tenía 16 y el 18 años, yo mexicana y el español, en los chats solo platicabas; para conservar el contacto tenías que intercambiar tu e-mail y agregarlo a tus contactos de messenger en hotmail, nos dimos nuestro e-mail y es así como mantuvimos nuestra amistad por dos años incluso llegamos a utilizar el correo postal para enviarnos alguna carta.
El 11 de enero del 2006 nos hicimos novios por internet y empezamos a “frecuentarnos” más vía e-mail y en messenger pasábamos más tiempo platicando, en julio de 2006 Ricardo vino desde Madrid a Puebla para conocernos, con todo y todo no es lo mismo 9 mil km de distancia y una pantalla que estar juntos, la relación continuó por dos años y en febrero del 2008 nos dimos el sí, ese día definitivamente sellamos lo que este febrero es testigo de 10 años de matrimonio.