Churchill Downs sede y organismo que realiza el Derby de Kentucky, una de las carreras más importantes en el mundo del hipismo, informó que investigará la muerte de varios caballos previo a la realización de la competencia.
Fue el pasado 6 de mayo cuando se realizó la edición número 149 del Kentucky Derby donde el caballo Mage resultó como el ganador junto a su jockey Javier Castellano, de origen venezolano.
Pero, previo a la realización de la competencia se registró la muerte de siete caballos que pudieron haber sido parte de derby. Activistas de los derechos de animales levantaron la voz ante lo ocurrido por lo que la organización decidió tomar cartas en el asunto.
En un comunicado, Churchill Downs explicó su compromiso por la salud y el bienestar de los caballos, por lo que los fallecimientos son un recordatorio urgente para explorar todas las vías posibles y minimizar de manera efectiva el riesgo para los animales.
“Hay más por hacer y trabajaremos rigurosamente para comprender qué causó estos incidentes y aprovechar nuestros datos, programas y prácticas existentes para comprender mejor lo que ha sido increíblemente difícil para nosotros ser testigos y aceptar en esta semana”, detalló la organización.
Recordaron que trabajan de manera activa con la Comisión de Carreras de Caballos de Kentucky (KHRC, por sus siglas en inglés) y con la Autoridad de Integridad y Seguridad de las Carreras de Caballos (HISA) para investigar cada incidente y aplicar algún aprendizaje que se encuentre para mejorar la seguridad de su deporte.
“Cada caballo que participa en las carreras en Churchill Downs debe someterse a múltiples y completos exámenes veterinarios y observaciones para garantizar su aptitud para la carrera”, indicó la organización. “El equipo de Churchill Downs trabaja durante todo el año para ofrecer un evento inspirador y de clase mundial a miles de fanáticos, pero también para brindar el entorno de carrera más seguro todos los días”.
Los fallecimientos de los caballos
De acuerdo a los reportes de la organización, Code Kings fue el primer caballo que falleció el pasado 29 de abril cuando comenzó a dar volteretas de manera repentina y terminó por romperse el cuello previo a una carrera, al parecer al estar inquieto por las luces de un DJ, señaló su entrenador.
Take Charge Briana tuvo que ser sacrificado tras sufrir una lesión en carrera el 2 de mayo. Wild on Ice fue sacrificado el 4 de mayo tras sufrir una lesión en una sesión de entrenamiento.
Parents Pride y Chasing Artie fallecieron en circunstancias misteriosas a principios de mayo y de este caso el entrenador Saffie Joshep Jr fue suspendido de manera indefinida. Chloe’s Dream y Freezing Point tuvieron que ser sacrificados el sábado 6 de mayo tras sufrir lesiones en carrera que parecían no recuperables.
Para que un caballo pueda ser parte del Derby de Kentucky debe de ser un purasangre con tres años de edad y deben de conseguir la cantidad de puntos necesaria en varias carreras anteriores que son comúnmente conocidas como el “Camino al Derby de Kentucky”. Desde el 2019 también se realizan carreras clasificatorias en Japón y Europa.
¿Cuál es el costo de un caballo de carreras?
Se estima que en Estados Unidos nacen 20 mil potros pura sangre por año, por lo que en el Derby de Kentucky solo veinte caballos logran competir por año, es decir solo el 0.001 por ciento lo logrará.
Esto no exime la gran inversión que realizan tanto los criadores de caballos de carreras como aquellos empresarios que ven en el hipismo otro deporte en el cual competir.
Un caballo de carreras se puede adquirir por medio de un propietario privado o en una subasta. En Estados Unidos existen una gran cantidad de criaderos en donde se puede recibir todo tipo de información del pedigrí del caballo y la forma en que fue llevada su crianza para ser competitivo.
Respecto a las subastas, existen organismos como Keeneland Sales, fundada en 1935 y que realiza tres subastas al año para compradores interesados en adquirir un caballo de carreras.
Los costos pueden ser bastante variados y el récord de venta pertenece a Fusaichi Pegasus, que fue comprado por 4 millones de dólares para posteriormente ganar el Derby de Kentucky en el año 2000.
Si se desea tener uno desde que es una cría, lo recomendable es adquirir una yegua de calidad, con precios de 50 mil a 400 mil dólares en promedio, y después pagar por un semental. Las tarifas de los sementales van de los 10 mil a los 150 mil dólares y existen casos donde ganadores de la competencia como American Pharoah y Tapit tienen una tarifa de 200 mil a 300 mil como sementales.
Los costos de crianza de un caballo de alto nivel van desde los 150 mil dólares y se debe pagar una cuota de 600 dólares por caballo como tarifa de nominación para que sea elegible para participar en el Derby de Kentucky. Esto no es lo mismo a la inscripción, que tiene un costo de 25 mil dólares y hay que desembolsar otros 25 mil dólares si logra llegar a la carrera principal. Tarifas menores aplican para las carreras de primavera e invierno donde se alcanzarán los puntos para ser invitado.
A pesar de que parece una gran inversión, el ganador de la competencia obtiene un premio de entre 2 millones a 1.4 millones de dólares, mientras que el trofeo de ganador es realizado con oro y está valuado en 95 mil dólares. Del premio recibido, 60 por ciento es para el dueño del caballo, 10 por ciento para el entrenador, 10 por ciento para el jockey y el 20 por ciento se deslinda a gastos de pista y otras bonificaciones al personal que hace posible la carrera.
Desde el lado de la conservación animal como del económico, la muerte de los caballos significa una gran pérdida para quienes organizan las competencias de hipismo y sus participantes en especial una tan clásica como el Derby de Kentucky.
