Aunque los dirigidos por Ricardo Carbajal tuvieron la oportunidad de sentenciar el encuentro en varias ocasiones, el gol de vestidor de Guillermo Martínez y la anotación al minuto 30 de Rogelio Funes Mori repartieron las unidades del encuentro dejando al Club Puebla con apenas nueve unidades en el último tercio del torneo.
Puebla ha encontrado cierto gusto por los goles de vestidor cambiando de autor y pareciera que el señalar que La Franja tenía carencia de gatilleros fue una clase de invocación para Guillermo Martínez, quien anotó en los primeros tres minutos ante Monterrey y frente a su gente.
Sin duda la jugada individual que realizó Brayan Angulo tuvo mucho que ver para que Puebla se adelantara en el marcador, pues gracias a su desborde por banda izquierda se logró el centro que Memo Martínez definió con clase dentro del área.
Inspirados por la ventaja, el conjunto blanquiazul mantuvo la presión hacia el frente tratando de sorprender a Esteban Andrada que a la par de la suerte que suele acompañar a los arqueros, evitó que los jugadores poblanos ampliaran la ventaja.
Por parte de los regiomontanos Rogelio Funes Mori trató de aprovechar los espacios que la defensa poblana probando a Jesús Rodríguez quien se mostró seguro bajo los tres postes.
Carlos Baltazar quiso sumar un tanto más a su cuenta propia intentando desde dos perspectivas diferentes, el primero con un tiro a distancia que pasó por encima de la portería de Rayados y su segundo tiro fue rechazado por el poste derecho de Andrada, razón por la que los aficionados se emocionaron al ver tan cerca el segundo tanto.
Angulo no solo destacó durante la primera mitad por sus recorridos para asistir a los punteros, sino también por la oportunidad que tuvo dentro del área que fue interrumpida tras perder el control del esférico dentro del terreno de Rayados, perdiendo nuevamente la oportunidad de lograr un segundo tanto.
Monterrey hizo uso de la ley “gol fallado, gol anotado” y mientras la adrenalina llevó a Puebla a abrir espacios en la última zona, situación que Jordi Cortizo aprovechó para centrar el esférico por la banda izquierda y Rogelio Funes Mori apareció para rematar de cabeza y convertir el primer tanto de Rayados.
Previo al término de los primeros 45 minutos, ambas escuadras tuvieron una oportunidad más de convertir el segundo tanto, pero el tiempo fue insuficiente y las definiciones fueron carentes de precisión.
Tras el silbatazo del tiempo complementario, Monterrey salió del vestidor con la firme intención de recuperar el dominio del encuentro, lo cual lograron de a poco al mostrarse mejor plantado en la cancha del dos veces mundialista.
Incluso los dirigidos por Fernando Ortiz estuvieron muy cerca de consumar su segundo tanto de no ser por “La Araña” Rodríguez que tuvo intervenciones puntuales para cerrarles la puerta ante la intensidad que mostraron los visitantes.
A los 58 minutos y luego de un rechace del guardameta poblano, Funes Mori se encontró en solitario en el corazón del área anotando su segundo tanto dejando la incertidumbre de si se encontraba o no habilitado, decisión que finalmente el silbante terminó por definir como un gol anulado.
Cerca de 10 minutos después, en los 67’, fue el turno de Puebla donde volvió a emocionar a los enfranjados con un gol que terminó por ser anulado por la posición adelantada de Martín Barragán que, tras el grito ahogado de gol, pidió disculpas a sus compañeros.
Jesús “Tecatito” Corona no tuvo el protagonismo del encuentro, pese a sus intentos de marcar su primer tanto con la camiseta de los Rayados, aunque no pudo encontrar ni la posición ni la fuerza adecuada para mandar al fondo de la red el esférico.
Pese al intento de ambas escuadras las redes no volvieron a moverse culminando el encuentro de la jornada número 11 con un empate por la mínima, lo que deja a Puebla con 9 unidades siendo parte de la parte baja de la tabla general.
