¡Negocio vs deporte! Lobos BUAP: una novela por el poder

Los intereses extinguieron a La Manada

Alland Jhonnathan

  · miércoles 12 de junio de 2019

Al igual y como la caja de Pandora, el ascenso de Lobos en el 2017 destapó los peores vaticinios para el equipo rumbo a su debut en la Primera División. También generó un halo de optimismo para el futbol poblano y sus fanáticos después de tantos años de mediocridad en la máxima categoría.

Dos años después, un descenso, el pago de 120 millones pesos a cambio de permanecer en Primera, dos cambios de técnicos, dos de directivas y la venta de la franquicia a Juárez acabaron por darle la razón a todos aquellos escépticos sobre el proyecto deportivo de La Manada.

Los licántropos pasaron de ser la revelación de la Liga MX en el Apertura 2017 al hazmerreír en el Clausura 2018, esto luego de descender tras sumar apenas nueve puntos en dicho torneo, tirando por la borda una importante ventaja sobre Veracruz en la porcentual.

Un año después de aquella debacle, y con la salvación lograda a seis fechas del fin de la competencia, Lobos simplemente desapareció por mano propia, al ponderar el negocio.

Aunque, a decir verdad, el destino de La Manada se selló en la máxima categoría en dos momentos: el descenso de 2018 y el conflicto de intereses entre el patronato de Mario Mendívil y la universidad.

Hace 365 días, los jerarcas de la división trataban de congelar a Lobos violando el reglamento, pues se decía no le aceptarían a La Manada el pago de los 120 millones para conservar su lugar en Primera. Luego pondrían a la venta la plaza vacante en la competición al mejor postor.

El plan se reveló y la Liga MX sin más recurso para dejar al representativo de la Benemérita fuera de la jugada, se inventó una auditoria con el fin de conocer la procedencia del dinero. La Manada, o sus nuevos inversionistas, cumplieron a cabalidad el engorroso trámite y el torneo debió de darle por segunda vez más la bienvenida.

Tras cumplir con lo administrativo, Lobos presentaba a su nueva dirigencia: Mario Mendívil, empresario de la construcción, fungiría como presidente del patronato; Juan Carlos Bozikian y Antonio Álvarez le acompañarían.

Mendívil y Álvarez debutaban en el futbol; Bozikian regresaba después de hacerse cargo de Lobos en el Ascenso MX.

Sin embargo, el nuevo patronato se halló con la renuencia de los vestigios de la antigua directiva, careciendo de peso en la toma de decisiones.

El conflicto entre ambas partes se hizo inminente y estalló a finales del 2018, orillando a Mario Mendívil y a su grupo a amenazar a la universidad con demandarla, en aras de lograr el control total del club tras cubrir la multa de los 120 millones de pesos.

La universidad finalmente cedió y perdió el control del equipo. Mendívil entonces asumía con unos Lobos gozando de buena salud dentro de la tabla porcentual, después de un Torneo Apertura 2018 de 19 unidades.

Pero la gestión del empresario arrancó mal, con adeudos a la plantilla y cuerpo técnico, como si se tratase de un aviso del destino inevitable de Lobos, concretándose el mismo seis meses después.

Dos años más tarde de la irrupción de La Manada en la Primera División, ésta dejó de existir por la falta de liderazgo de una directiva a la hora de apretar a los futbolistas o al cuerpo técnico en el Clausura 2018, porque aquello hubiese evitado el conflicto de intereses entre la universidad y el grupo de Mendívil un año después.

  • 68 PARTIDOS disputó Lobos en la Primera División en dos años
  • 20 VICTORIAS logró La Manada, sumando 11 empates y 37 descalabros
  • 71 PUNTOS cosechó el conjunto licántropo