Les apedrearon el rancho durante el primer tiempo con cinco remates entre los tres postes y Lobos mantenía el cero.
Pero la suerte universitaria cambió al sexto y séptimo intento de los Tuzos, justo en la reanudación, y La Manada cayó 3 por 0 en La Bella Airosa para extender su mala racha lejos de casa a cinco partidos perdiendo.
La ofensiva de los Tuzos descifró a una de las mejores defensas del torneo, después de marcar apenas un gol durante el primer mes de competencia. Aunque sólo explotó con el ingreso durante el complemento de Víctor “El Talismán” Guzmán.
El mediocampista debió de salir del banquillo para ganarle el duelo a Paco Ayestarán, quien de no sumar el sábado se hubiera metido en un verdadero predicamento.
El técnico español le ganó la partida a Francisco Palencia, pues a la velocidad con la cual superó una y otra vez a Lobos durante los primeros 45 minutos, le agregó el descaro de Guzmán en la parte complementaria.
El mediocampista ofensivo se hizo sentir en su primer balón, donde después de controlar un cambio de juego, se tiró un autopase para dejar a Aldo Cruz por el camino, con la vía libre lanzó la pelota al corazón del área con un auténtico busca piernas, el cual halló a Ángelo Sagal, quien de primera conectó para batir a Antonio Rodríguez.
Al 57’, Guzmán pasó de emisor a receptor para amaestrar a La Manada gracias a un servicio del argentino Franco Jara.
Guzmán remató con toda comodidad dentro de área chica universitaria, con “El Maza” Rodríguez y Michael Orozco por delante de él como meros espectadores.
Lobos trató luego del 2-0, pero sus ataques carecían de peligrosidad, como si los colmillos los hubiese perdido con la partida de Julián Quiñones a Tigres.
Después de una breve, pero tímida reacción de La Manada, Pachuca volvió a la carga; no obstante, se topó en par de ocasiones con Antonio Rodríguez.
El cancerbero, lo mejor de los licántropos después de cinco fechas, tapó sendos intentos hidalguenses desde fuera del área para mantener el decoro en el marcador.
Sólo la velocidad de Pachuca volvió a marcar la diferencia.
Francisco Figueroa, amo y señor de la banda izquierda, llegó hasta el fondo del área para servir una diagonal matona a Erick Gutiérrez, quien de derecha conectó para colocarle a nueve minutos del final la puntilla a Lobos.
Lo de La Manada, no sumar fuera de casa, es crónico. Y el cuadro amenaza con empeorar el miércoles, en el arranque de la doble fecha cuando reciba a Rayados de Monterrey en el Universitario.
En tres visitas al Hidalgo, dos en Liga MX y la restante en Copa, Lobos apenas convirtió un gol y se comió siete.
- 3 VISITAS al Hidalgo y Lobos sigue sin lograr una victoria o puntos.
- 9 MESES sin conocer la victoria por la carretera registra La Manada.