/ domingo 24 de julio de 2022

Leslie Bifano, fisicoculturista poblana campeona estatal

Leslie Elizabeth Bifano Madrid creció entre aparatos de gimnasio, pesas y competencias en las que vio a su padre alzar triunfos

Bifano no es un apellido común, pero en el mundo del fisicoculturismo poblano es muy conocido, ya que es una familia dedicada a las competencias de este deporte y ostentan varios campeonatos estatales y nacionales.

Leslie Elizabeth Bifano Madrid creció entre aparatos de gimnasio, pesas y competencias en las que vio a su padre alzar triunfos. A la edad de 13 años decidió empezar a entrenar; aunque no de manera formal, fue el comienzo para llegar a su objetivo actual, que es competir en los campeonatos internacionales, pues ya ha alcanzado sus metas inmediatas en los campeonatos estatales y nacionales en dos de las tres categorías que este deporte ofrece para las mujeres.

Con 19 años e iniciando en el mundo de las competencias ganó la categoría bikini a nivel estatal y a nivel nacional en la categoría wellness. Actualmente entrena con el coach Mauricio Mondragón, quien es un ganador de competencias internacionales.

Aunque los antecedentes del fisicoculturismo se ligaron directamente con el concepto varonil, los nuevos tiempos han modificado esta idea y en la década de los ochenta se abrieron las competencias para las mujeres y modificaron también los requerimientos a calificar, ya que en mujeres el uso de esteroides no es necesario para elevar su musculatura.

Aunque la categoría figura si está dedicada al desarrollo extremo de la musculatura, la categoría wellness permite a las competidoras desarrollar una musculatura natural, pero cuidar el cuerpo; para llegar a esa estética requiere de cuidados, disciplina y muchas horas de ejercicio. Lo anterior, lo sabe Leslie, quien invierte gran parte de su día en realizar varias rutinas de ejercicios y cuidar su alimentación para alcanzar sus objetivos.

Para ella amor es lo que siente por la disciplina que les requiere esfuerzos extraordinarios días previos a la contienda, ya que su cuerpo debe estar deshidratado al máximo y con escaso alimento para que se puedan definir mejor la simetría de los músculos. La dieta se vuelve entonces más rigurosa, y en ocasiones resulta adversa para la salud, por lo que Leslie estudió nutrición para no lastimar en demasía su salud y encontrar un equilibrio que le permita llegar a niveles más saludables.

La constancia, la disciplina y otras cualidades son los otros logros en la carrera de Leslie a la par de los trofeos, pero sobretodo la satisfacción de alcanzar en su cuerpo esas cualidades extraordinarias que busca desde sus inicios la disciplina del fisicoculturismo.

Bifano no es un apellido común, pero en el mundo del fisicoculturismo poblano es muy conocido, ya que es una familia dedicada a las competencias de este deporte y ostentan varios campeonatos estatales y nacionales.

Leslie Elizabeth Bifano Madrid creció entre aparatos de gimnasio, pesas y competencias en las que vio a su padre alzar triunfos. A la edad de 13 años decidió empezar a entrenar; aunque no de manera formal, fue el comienzo para llegar a su objetivo actual, que es competir en los campeonatos internacionales, pues ya ha alcanzado sus metas inmediatas en los campeonatos estatales y nacionales en dos de las tres categorías que este deporte ofrece para las mujeres.

Con 19 años e iniciando en el mundo de las competencias ganó la categoría bikini a nivel estatal y a nivel nacional en la categoría wellness. Actualmente entrena con el coach Mauricio Mondragón, quien es un ganador de competencias internacionales.

Aunque los antecedentes del fisicoculturismo se ligaron directamente con el concepto varonil, los nuevos tiempos han modificado esta idea y en la década de los ochenta se abrieron las competencias para las mujeres y modificaron también los requerimientos a calificar, ya que en mujeres el uso de esteroides no es necesario para elevar su musculatura.

Aunque la categoría figura si está dedicada al desarrollo extremo de la musculatura, la categoría wellness permite a las competidoras desarrollar una musculatura natural, pero cuidar el cuerpo; para llegar a esa estética requiere de cuidados, disciplina y muchas horas de ejercicio. Lo anterior, lo sabe Leslie, quien invierte gran parte de su día en realizar varias rutinas de ejercicios y cuidar su alimentación para alcanzar sus objetivos.

Para ella amor es lo que siente por la disciplina que les requiere esfuerzos extraordinarios días previos a la contienda, ya que su cuerpo debe estar deshidratado al máximo y con escaso alimento para que se puedan definir mejor la simetría de los músculos. La dieta se vuelve entonces más rigurosa, y en ocasiones resulta adversa para la salud, por lo que Leslie estudió nutrición para no lastimar en demasía su salud y encontrar un equilibrio que le permita llegar a niveles más saludables.

La constancia, la disciplina y otras cualidades son los otros logros en la carrera de Leslie a la par de los trofeos, pero sobretodo la satisfacción de alcanzar en su cuerpo esas cualidades extraordinarias que busca desde sus inicios la disciplina del fisicoculturismo.

Deportes

Selección Mexicana queda a deber en su vuelta al Estadio Cuauhtémoc

La Selección Mexicana pasó de derrotar 2-0 al conjunto Che a ser alcanzado por el conjunto naranjero con doblete incluido de Dani Gómez

Local

Rehabilitación de mercados, clave para dignificar actividad comercial: Sergio Salomón

El mandatario poblano señaló que así como en ese municipio, en otros diez se rehabilitaron los mercados

Estado

Fundación Rey Cempoala lanza programas educativos, culturales y recreativos en la Sierra Norte

Históricamente las personas de la Sierra han sido vulneradas, por lo que sus necesidades han sido olvidadas

Local

Sistema de gestión de pavimento, la propuesta de ingenieros para reducir el surgimiento de baches

Muchos de los hundimientos y zanjas que prevalecen en la demarcación se deben a la baja calidad con la que se colocan algunos pavimentos

Cultura

Casa de Munuera, el Palacio Federal del siglo XIX | Los tiempos idos

El último propietario que la uso como vivienda fue el exgobernador Ignacio Romero Vargas, quien la vendió al Gobierno de México