Uno de los insectos más peligrosos de México son las arañas violinistas, esto no sólo por lo poderoso del veneno que emite su mordedura, sino también porque suele esconderse en lugares frecuentados por humanos y animales, pudiendo causar desde parálisis severas hasta la muerte, aunque estas no suelen estar presentes entre nosotros en todas las épocas del año.
Y es que, tal y como sucede con insectos como las cucarachas, existen épocas en las que es más favorable que ciertos animales se reproduzcan, por lo que aquí te decimos la manera en la que se pueden identificar estos arácnidos, además de los problemas que pueden causar, así como algunas recomendaciones para evitar su presencia en viviendas y otros sitios.
¿Cuándo se da la temporada de arañas violinistas?
De acuerdo con las autoridades, con la llegada de las lluvias se incrementa la aparición de estos seres, que presentan un incremento en los meses de mayo, junio y julio; la relevancia que se le da radica en el hecho de que su mordedura tiene consecuencias mortales, por lo que dentro de las bondades de este ser se encuentra que funciona como aliado contra las plagas.
Es por ello que pese a la letalidad que tienen, las autoridades y los expertos no buscan acabarlas, pues tienen un papel importe en el rol ecológico, ya que cumplen una función estabilizadora de plagas, pues se encargan de restringir el crecimiento exponencial de poblaciones específicas, por lo que suelen ser utilizadas en sistemas agrícolas con la intención de eliminar insectos.
Su problema radica en que suelen esconderse en rincones de las viviendas e incluso entre la ropa, por lo que un movimiento en falso puede hacer que a manera de defensa estos pequeños seres lancen una mordedura, tras la cual la recomendación es acudir de manera inmediata el médico, pues entre mayor sea el avance del veneno más grande será el problema.
¿Qué caracteriza a las arañas violinistas?
Estos seres suelen ser identificados con tres principales características, mismas que pueden ser detectadas a simple vista, aunque personas que no las conocen pueden tener dificultades para identificarlas, estas señas son que tienen seis ojos, ocho patas alargadas y delgadas como la vara de un violín, de aquí que se le de este nombre, además de pueden tener colores café o gris.
Cabe señalar que de este tipo de arácnidos existen más de 130 especies distribuidas en todos el mundo, de las cuales 101 se localizan en Centro y Norteamérica, 22 en África, 8 en Europa y sólo 2 en Asia, siendo las más conocidas y a las que se les atribuyen más casos clínicos las Loxosceles laeta, Loxosceles intermedia y Loxosceles gaucho en Sudamérica; Loxosceles reclusa en Estados Unidos y Loxosceles rufescens en Europa y Medio Oriente.
Finalmente, en cuanto a México, su diversidad es mayor en el norte del país y disminuye conforme se llega al sur del continente, predominando su presencia en estado como Baja California Sur, Baja California y Sonora, con cinco especies cada uno, además de las especies que se han exportado de otras zonas del mundo.