Científicos de Australia y Estados Unidos, encabezados por la empresa Colossal, buscan hacer realidad el proceso que nombran como “desextinción” y traer de regreso a la vida al tigre de Tasmania.
Originario de la isla ubicada en Australia, el tigre de Tasmania es una de las especies que sufrió de la caza humana que lo llevó en tiempo muy corto de tiempo a su extinción total en la década de 1930.
Ahora, con la ayuda del avance de la tecnología y de nuevas innovaciones que se buscan alcanzar en el desarrollo de especies se busca traer a este marsupial de regreso. A pesar de su gran cantidad de especies de animales, Australia cuenta con la tasa de extinción de mamíferos más alta en el mundo.
El proyecto que busca traer de regreso al tigre de Tasmania
Andrew Pask, doctor y profesor de Biociencias en la Universidad de Melbourne y líder del equipo de científicos genéticos en el laboratorio TIGRR (Thylacine Integrated Genetic Restoration Research), es quien lidera la investigación al haber publicado más de 100 artículos sobre genética del desarrollo y con un trabajo de al menos 20 años, centrado en secuencias del genoma del marsupial extinto.
Por ello, se unió al Consejo asesor científico de la empresa Colossal, que lo ayudarán a tomar las células madre de una especie de marsupial viva con ADN similar al del tigre para luego utilizar esta tecnología para traer a la especie de vuelta, o por lo menos a un animal bastante similar.
De manera específica, el plan se desarrolla en 10 pasos que comienzan con el genoma actualizado obtenido por el doctor Pask y actualizado en 2022. Después se generan genomas de referencia de alta calidad para todos los parientes vivos más cercanos del tigre y se determina el mejor.
Se buscan ductos de genotipo a fenotipo en los marsupiales vivos para mejorar el huésped receptor y hacerlo lo más similar posible al tigre de Tasmania. Por medio de ensayos y la tecnología se crea la secuenciación del ADN y se agrega el genoma de un Dasyurid, otra familia de marsupiales actualmente en el mundo.
El núcleo con la célula similar a la del tigre se transfiere entonces al huevo de un miembro de la familia de Dasyrud y se estimula su crecimiento embrionario hasta que esté listo para ser trasferido a un sustito. Una vez ahí se implanta y se gesta en el sustituto por un periodo de 42 días.
Una vez con vida se debe procurar el nacimiento y maduración de la especie, para después pensar en regresarlo a su hábitat.
“Estamos muy emocionados de que TIGRR se asocie con Colossal en este viaje. Ambos compartimos la misma visión y pasión por la ‘desextinción’ del tigre”, explicó el doctor Pask. “Trabajar juntos nos permitirá hacer de esto una realidad más rápido de lo que podríamos haber esperado”.
¿Cómo se extinguió el tigre de Tasmania?
El tigre de Tasmania es un mamífero de la infraclase marsupial con una longitud ente los 99 a 130 centímetros, podría llegar a vivir de cinco a siete años en la naturaleza y alcanzaba velocidades de hasta 39 km/h. Su nombre lo recibió por las rayas, de 15 a 20 de ellas, que se marcaban desde su hombro por toda su espalda.
Su presencia se dio principalmente en los bosques y praderas de la isla de Tasmania y al sur de las costas de Australia. Era carnívoro al alimentarse de aves, lagartijas y pequeños mamíferos, este fue el problema que marcó a su especie ya que habría sido cazador de ovejas y de ganado.
Con la llegada de la colonización europea a Australia y el ingreso de los animales de ganado, el tigre de Tasmania se comenzó a convertir un problema al punto de verse como una especie de plaga, aunque no existen datos de que haya eliminado a una gran cantidad de ganado como se estima.
Organismos como el Parlamento de Tasmania incluso ofreció recompensas para la caza de su especie lo que provocó que su número disminuyera de manera alarmante. El gobierno de Australia promovió su conversación hasta 1936, pero fue demasiado tarde y para septiembre de ese año falleció el último espécimen que se encontraba en cautiverio en el Zoológico de Beaumaris de nombre Benjamin.
Entre sus particularidades, debido a la forma de su cráneo ha sido confundido muchas veces con una especie de perro, aunque el tigre de Tasmania contaba con 46 dientes afilados. Al ser un marsupial contaba con una bolsa abdominal, como la que tienen los canguros, y era funcional en los dos sexos.
Para los machos la bolsa servía como una protección para sus órganos reproductivos y en las hembras era un transporte para sus crías que podían llegar a ser hasta cuatro. Las crías abandonaban el cuerpo de la madre hasta que llegaban a la mitad de su crecimiento.
El tigre de Tasmania era un animal nocturno al cazar de noche y durante el día dormía en cuevas o en gruesos árboles. No se debe confundir con el demonio de Tasmania, otra especie más pequeña y con la que también guarda relación, que en la actualidad se encuentra al borde de la extinción también en Australia.