Sin duda uno de los eventos más devastadores de la naturaleza son los huracanes, por lo que la Universidad Internacional de Florida en Estados Unidos se dio a la tarea de crear un laboratorio-simulador de estos fenómenos, en el que mediante un “Muro del Viento” instalado en un hangar de aviones buscan recrear los efectos de estas corrientes aire a fin de generar estrategias.
El proyecto fue creado por ingenieros del Instituto de Eventos Extremos de dicha universidad y el objetivo es diseñar y construir estructuras que puedan resistir a vientos de más de 250 kilómetros por hora, acompañados por una tormenta de categoría 5, esto considerando que el cambio climático amenaza con incrementar estos fenómenos, por lo que ya se piensa en un nuevo laboratorio.
¿En qué consiste el “Muro del Viento” y cómo genera resultados el laboratorio de huracanes?
El llamado “Muro de Vientos” consiste en 12 enormes ventiladores que recrean la fuerza de un gran huracán, es decir de entre 273 y 305 kilómetros por hora, datos que tomaron de fenómenos como el huracán Patricia que golpeó México en 2015 con vientos de 346 km/h y el huracán Dorian que se estrelló en las Bahamas en 2019 con vientos de 297 km/h, con el que en segundos paredes y techos de una maqueta del tamaño de una casa terminan por ser arrancados y arrojados a un campo cubierto con una red.
Tal ha sido el éxito debe este proyecto, que con una subvención de 12 millones de euros de la Fundación Nacional de la Ciencia (NSF), la universidad tiene pensado diseñar un laboratorio en el que se puedan probar los efectos de vientos de hasta 321 kilómetros por hora, además de añadir equipos que puedan inundar casas modelo de tamaño real incluyendo el efecto de marejadas de seis metros.
Laboratorio-simulador de huracanes, un esperanza de salvación para el mundo
De acuerdo con los involucrados en el proyecto, las más recientes investigaciones han revelado que el cambio climático también afectará a los huracanes convirtiéndolos en fenómenos más lentos, más lluviosos y más propensos a intensificarse de manera más rápida incluso la escala Saffir-Simpson cataloga como la categoría 5 a la más alta y los científicos no se ponen de acuerdo sobre la creación de una categoría 6.
Mientras algunas voces afirman que esta clasificación podría centrar excesivamente la atención en el viento, mientas que el 90% de las muertes provocadas por estos fenómenos en Estados Unidos son provocadas por las mareas de las inundaciones, por lo que el laboratorio Wall of Wind de la FIU fue pensado como una respuesta al huracán Andrew que azotó el sur de Florida en 1992 y causó daños por valor de 25 000 millones de dólares.
Debido a lo larga y dolorosa que fue la recuperación e incluso los códigos técnicos de construcción contra huracanes tuvieron que cambiar en Florida proceso que se sigue robusteciendo año con año, por lo que los ingenieros de la FIU se han enfocado en la tarea de protección de las estructuras con sólo pequeñas adaptaciones que pueden contribuir a endurecer las casas contra los vientos .
Este laboratorio es el mayor de su clase en Estados Unidos, con la capacidad de ensayar vientos máximos de categoría 5 a través de ventiladores de dos metros de ancho y 6800 kilogramos cada uno, los cuales al soplar a 100 km/h, el rugido es tan fuerte que se tiene que gritar en las conversaciones, en lo que respecta a la nueva instalación de la FIU que se llamará NICHE, por National Full-Scale Testing Infrastructure for Community Hardening in Extreme Wind, Surge, and Wave Events (Infraestructura Nacional a Escala Real para la Prueba de Endurecimiento Comunitario en Eventos de Vientos, Marejadas y Olas Extremas, en español, contara con 12 metros de altura, el doble de la altura de la casa del Muro del Viento, incluso otras ocho universidades y una empresa privada colaboran con la FIU en el prototipo.
