Uno de los eventos astronómicos más importantes de este año ocurrirá el próximo 8 de abril con el eclipse solar, uno que podrá verse en distintos puntos de México y Estados Unidos, y para el que organizaciones de la NASA ya se preparan para realizar investigaciones más profundas sobre el fenómeno.
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De acuerdo con un comunicado, la organización dedicada a la investigación aeroespacial informó que durante el eclipse lanzará tres cohetes con la intención de conocer más sobre cómo se ve afectada la atmósfera superior de la Tierra cuando la luz solar se atenúa de manera momentánea y sobre una parte del planeta.
Estos cohetes fueron nombrados como sondeo de Perturbaciones Atmosféricas alrededor de la Ruta del Eclipse (APEP, por sus siglas en inglés), los cuales se lanzarán desde las instalaciones de vuelo Wallops ubicada en Virginia, Estados Unidos.
Una vez en el espacio, permitirán a los científicos estudiar las perturbaciones en la ionosfera creadas cuando la Luna eclipsa al Sol en una misión que se encuentra dirigida por Aroh Barjatya, profesor de ingeniería física en la Universidad Aeronáutica Embry-Riddle de Florida, desde donde dirige el Laboratorio de Instrumentación Espacial y Atmosférica.
Como parte de la investigación, los cohetes se lanzarán en tres momentos diferentes del eclipse, 45 minutos antes de que ocurra, durante el eclipse y 45 minutos después de que alcance su punto máximo.
La razón de estos intervalos se debe a que son puntos clave para recopilar datos sobre cómo la repentina desaparición del Sol afecta a la ionosfera, lo que crea perturbaciones que tienen el potencial de interferir con las comunicaciones en la Tierra.
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Esta no es la primera vez que este tipo de cohetes son utilizados por la NASA durante un eclipse, ya que también fueron lanzados para pruebas durante el eclipse lunar de octubre en 2023 y recuperados posteriormente con éxito.
La atmósfera y sus implicaciones en el eclipse
En el comunicado, la NASA detalló que la ionosfera es una región de la atmosfera terrestre ubicada entre 90 a 500 kilómetros sobre el suelo y forma el límite entre la atmosfera inferior de la Tierra, es decir donde vivimos, y el vacío del espacio.
Su nombre se debe a que es un espacio lleno de partículas que se ionizan o que se cargan eléctricamente por medio de la energía del Sol o la radiación solar. Durante la noche, esta parte se adelgaza a medida que las partículas ionizadas se relajan y se recombinan nuevamente en partículas nuevas.
Pese a esto, se tiene registro de que el clima terrestre y espacial de la Tierra puede impactar en las partículas, para convertirla en una región dinámica y que sea complicado su estudio sobre cómo sería en momentos determinados como al ocurrir un eclipse.
Su estudio también es complicado con el uso exclusivo de satélites ya que es posible que no estén en el momento ni en el lugar para cruzarse con la trayectoria del eclipse.
Con los cohetes, ahora la NASA puede lanzarlos en el momento adecuado y en todas las latitudes de la ionosfera para estudiarlas durante el eclipse. Al respecto, se espera que alcancen una altitud máxima de 420 kilómetros y cada cohete estará encargado de medir la densidad de partículas cargadas y neutras y los campos eléctricos y magnéticos circundantes.
"Cada cohete expulsará cuatro instrumentos secundarios del tamaño de una botella de refresco de dos litros que también miden los mismos puntos de datos, por lo que es similar a los resultados de quince cohetes, aunque sólo se lanzan tres", comentó Aroh Barjatya.
"Comprender la ionosfera y desarrollar modelos que nos ayuden a predecir perturbaciones es crucial para garantizar que nuestro mundo, cada vez más dependiente de las comunicaciones, funcione sin problemas", añadió el científico.
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Respecto al eclipse, se explicó que, a medida que su sombra recorre la atmósfera, crea una puesta de Sol rápida que desencadena distintas ondas atmosféricas a gran escala y perturbaciones a distinta escala, las cuales pueden afectar a frecuencias de comunicación por radio. Tener conocimiento de estas ayudará a predecir posibles perturbaciones en las comunicaciones, en especial en aquellas de alta frecuencia.
La NASA informó que el lanzamiento de estos cohetes durante el eclipse solar se podrá seguir por medio de sus distintas redes sociales y se presentarán durante su transmisión oficial del evento astronómico.
