Feligreses poblanos se dieron cita este sábado para dar inicio a la celebración de la Virgen del Carmen, decenas de ellos adornaron con flores su altar ubicado en el templo cerca del Centro Histórico, mientras que otros entonaron "Las Mañanitas" para quien les ha concedido durante muchos años los milagros más anhelados.
Remedios Sánchez solía visitar a la virgen cada 16 de julio en compañía de su hijo Damián, sin embargo, él falleció hace dos años a causa de una enfermedad renal, lo que dejó un gran vacío dentro de su corazón.
Ella relató que el visitar a la virgen en su día simboliza honrar la memoria de su hijo y sentir su compañía cerca nuevamente, pues realizar actividades que hacía con él en vida trae consigo buenos recuerdos de nostalgia y alegría.
Remedios desde hace más de tres décadas visita el Templo de la Virgen del Carmen para dejarle una ofrenda como flores y veladoras, afirmó además que gracias a Nuestra Señora del Carmen es que ha logrado salir adelante emocional y espiritualmente.
“Ella es muy milagrosa, por eso los poblanos la adoramos con tanta devoción, nos cuida, nos ama y nos protege siempre (…) Yo le pido y le agradezco por nuestra salud, porque a pesar de las tragedias tenemos comida en la mesa y una familia que nos recibe con los brazos abiertos al llegar a casa”, expresó.
LA FESTIVIDAD EN LA PLAZUELA DEL CARMEN
El Templo de la Virgen del Carmen se vistió de colores y detalles florales, pues desde muy temprano al dar comienzo las celebraciones eucarísticas se mostró gran afluencia de fieles, quienes llevaron sus escapularios e imágenes para que fueran bendecidos.
Como parte de la celebración anual en honor a la virgen se llevaron a cabo diversas celebraciones, donde más de 300 comerciantes se dieron cita para instalarse en la feria que forma parte de una de las festividades católicas más importantes de Puebla.
Desde las 08:00 horas se colocaron en el Parque del Carmen, ubicado entre las calles 15 y 17 Oriente del Centro Histórico de Puebla, los diversos puestos ofertando a los visitantes un sinfín de productos gastronómicos y artesanales.
Se sumó a ellos la colocación de juegos mecánicos y amenidades desde la plazuela hasta la calle 16 de Septiembre, donde cientos de poblanos al salir del templo degustaron antojitos típicos del lugar como molotes, chalupas, cemitas y mole de panza.