A partir de la pandemia por el coronavirus hemos escuchado en repetidas ocasiones sobre la importancia del uso del cubrebocas para prevenir contagios, pero también hemos oído voces de quienes se niegan a utilizarlo por diversas razones, por lo que el usuario de Youtube Allen Pan decidió crear una pistola que dispara estos materiales para quienes se nieguen a usarlo en lugares públicos.
En el video de poco menos de diez minutos el vloguero comienza mostrando la negativa de la gente a seguir las indicaciones para para ingresar diversos sitios e incluso a quienes terminan utilizando su ropa interior a falta de una mascarilla.
Incluso resalta que en los Estados Unidos, su país de residencia, muchos se niegan a portar esta protección pese a las elevadas cifras de contagios y muertes que ha dejado este virus sólo en la Unión Americana e incluso hace referencia a la Segunda Enmienda de la Constitución de ese país, que permite tener armas para comenzar su invento.
Incluso tras mostrar también las razones por las que se ha pedido usar cubrebocas a nivel mundial afirma que creó este artefacto porque “a situaciones desesperadas, medidas desesperadas”.
De acuerdo con la grabación, se puede observar como este dispositivo arroja las mascarillas mediante el funcionamiento de una pistola, a manera que cubre el área del rostro que debe proteger, mientras que las “balas” que lo proyectan le dan el peso para que se mantenga en la cara.
A lo largo de la grabación señala que simplemente busca atraer gente que se interese en el uso de la mascarilla, aunque ve difícil poder utilizarlo para el fin que lo creó pues también se han unido grupos de “anticubrebocas” para rechazar la imposición de este material.
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Tras utilizar diversos materiales que tenía en su garaje para darle forma a su idea e incluso divertirse un poco mientras experimenta sobre el funcionamiento, se dispone a probar el resultado con un oso de peluche y una escultura de rostro que tiene a la mano.
El principio que usó fue el del lanzamiento de una red que con los utensilios que es impulsada, también sirven para dar pero a la misma y atrapar a la presa que en este caso es hacer que el cubrebocas se quede en el rostro pero sin lesionar a la persona.
Incluso si eso no fuera del todo efectivo, a la mascarilla también le colocó unas pequeñas tiras adhesivas para que se quede pegada al rostro de quien la reciba y para no fallar cuenta con un apuntador láser para un tiro certero.
Tras esta serie de pruebas el joven decidió salir a probar su invento a la playa, donde nuevamente mostró como la gente se opone a esta medida, ahí junto con una joven comienza a probar el dispositivo en su persona.
Incluso invita a otras personas a probarlo en un maniquí, quienes celebraron la creatividad de Allen y se dijeron dispuestos a disparar si se toparan con alguien que desobedece esta norma en sitios públicos.
¿Te gustó este invento? ¿Lo utilizarías?
