¿Sabías que la extracción forzada de órganos en personas vivas es una práctica legal en China? No solo eso, se ha vuelto un negocio lucrativo que es fomentado por personas de todo el mundo que, sin importar de donde provengan dichos órganos, pagan miles de millones de dólares para obtener uno.
La extracción de órganos en China se ha practicado por más de 20 años, es una atrocidad que debe ser sancionada por no ser ética. La obtención de órganos es “a pedido” y se consiguen de donantes asesinados (ejecutados) que firmaron bajo sometimiento o tortura.
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A diferencia de una lista de espera de un órgano que puede no llegar a tiempo, en China te los consiguen en dos semanas. Los millonarios llegan en vuelos privados y son hospedados con todo lujo y una vez trasplantados regresan a su país de origen.
SUSTRACCIÓN FORZADA DE ÓRGANOS
La ley que permite la extracción de órganos de prisioneros ejecutados en China se implementó en 1984. La práctica fue denunciada en 2001, por el doctor Wang Guoqi, quien testificó ante el subcomité estadounidense de Relaciones Internacionales y Derechos Humanos, que cuando vivió en la República Popular China, había extraído órganos del cuerpo de más de 100 prisioneros ejecutados para ser trasplantados a pacientes ricos.
Así, China encontró una industria lucrativa en el trasplante de órganos y, no solo con grandes recompensas financieras, también proporcionó al régimen una herramienta para coaccionar e intimidar a la población para tenerla sometida.
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¿Esto que quiere decir?, que por pensar diferentes o tener una ideología que no es afín a la del Partido, encierran a las personas y bajo tortura las hacen firmar la “donación de sus órganos”, luego los ejecutan y proceden a la extracción. Esto es lo que se conoce como: extracción de órganos de prisioneros ejecutados.
A los detenidos se les llama “presos de consciencia” y en su mayoría son practicantes de Falun Gong o Falun Dafa, una práctica gratuita que, aseguran, los vuelve personas saludables y los impulsa a mejorarse día a día bajo los principios de verdad, benevolencia y tolerancia. Está prohibida en China desde 1999. Esta terrible persecución ha cobrado la vida de más de 2 millones de personas.
MÉDICOS UNIDOS
Este 26 de septiembre, los médicos contra la sustracción forzada de órganos (DAFOH, por sus siglas en inglés), concluyeron la cumbre mundial para Combatir y Prevenir la Extracción Forzada de Órganos en China, en la que participaron organizaciones no gubernamentales de Estados Unidos, Asia y Europa, que entienden la necesidad de abordar este problema que requiere una intervención inmediata de la comunidad internacional, la cual tuvo como objetivo de establecer un código unificado contra este crimen contra la humanidad sin precedentes.
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“El delito de extraer por la fuerza órganos de prisioneros vivos y sin consentimiento, con ánimo de lucro, con fines de trasplante, investigación u otros procedimientos médicos, conocido comúnmente como extracción forzada de órganos, supone un gran peligro para la humanidad, ya que viola los valores éticos universales, los principios morales de la vida y la dignidad humana, convirtiendo así la profesión médica en una práctica abusiva”, declaró el doctor Torsten Trey, director ejecutivo de DAFOH.
Checa la Declaración Universal derivada de la cumbre mundial para Combatir y Prevenir la Extracción Forzada de Órganos en China: