Durante varias décadas ha sido una costumbre escuchar la porra “mordida, mordida”, luego de cantar las mañanitas durante un cumpleaños, tras la cual se espera que el festejado acerque su boca al pastel para darle una probadita antes de repartirlo, momento en el que su rostro es empujado por alguien más contra el mismo a fin de llenarle de crema.
Pero con la llegada de las redes sociales y la posibilidad de capturar en video el momento, estas acciones festivas se han convertido en agresiones, pues en muchas ocasiones el pan termina destruido y los festejados cubiertos de este, además de que son bañados con otras sustancias como refrescos y salsas, pero hay una razón más para evitar esta práctica.
Pastel de cumpleaños tenía palos de madera en su interior y lo descubren con la “mordida”
Fue la usuaria de TikTok Fabiola Gabriela 42 (@19lobaherida78) quien compartió un video corto en el que se puede leer la descripción “Hay pastelerías en donde agregan palillos a los pasteles, así que piénsala dos veces antes de empujar a alguien a un pastel”, el cual se encuentra conformado por una serie de fotografías de lo que debió haber sido un día feliz para ella que casi termina en una tragedia.
La grabación de apenas diez segundos comienza con la frase “Imagina sufrir algo así el día de tu cumpleaños” junto con tres imágenes, en la primera se puede ver un pastel cortado, dentro del cual se ven por lo menos dos palos de madera de tamaño considerable con punta afilada, en otra a la mujer con un palo clavado aparentemente en la cavidad ocular y otra con un parche en el mismo ojo.
Según la información dada a conocer, la afectada sería originaria de Hermosillo, Sonora, y por fortuna todo habría quedado en un susto, pues pese a que el artefacto si se incrustó en el rostro de la mujer, específicamente en la zona de la ceja, lo hizo sin causar ningún daño en el globo ocular de la mujer, aunque la afectada terminó en una sala de urgencias.
Internautas reprochan a pasteleros por esta práctica
Pero los internautas no perdieron la oportunidad de expresar su opinión al respecto, generando gran cantidad de comentarios al respecto, muchos de ellos reprochando a los panaderos por llevar a cabo esta práctica, sin dar aviso a los clientes al momento de adquirir el producto e incluso afirmaron que la afectaba debía interponer una denuncia en contra del establecimiento.
Aunque también hubo aquellos que criticaron esta práctica, pues afirmaron que aún cuando un pastel no tenga estos objetos, quien introduce la cara en el producto puede terminar por asfixiarse al tapar tanto la nariz como la boca en el producto, sin importar que se trate de un niño o un adulto e incluso algunos afirmaron que desde hace un tiempo ya dejaron de lado esta práctica.
Finalmente, algunos más puntualizaron que esta práctica dejó realizarse sin necesidad de incidentes como este, sino que se quedó en desuso luego de que llegara la pandemia de Covid-19, pues este también podría representar un vehículo de contagio de esta y otras enfermedades, siendo lo más cercano que el festejado muerda la rebanada ya cortada en su plato.
