De enero a noviembre de 2022, el sector de la construcción en el estado de Puebla registró su peor cifra de ingresos en un periodo similar desde hace 16 años, es decir, desde el 2006, fecha en que el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI) comenzó con la recopilación de información.
Francisco Tejeda Ortega, presidente local de la Asociación Mexicana de la Industria de la Construcción (AMIC), dijo que el motivo de este problema fue porque casi no se realizaron obras de gran impacto económico, ya que solo hubo proyectos como pavimentación de calles y elaboración de guarniciones, cuando anteriormente se desarrollaban carreteras, puentes y hospitales.
A través de la Encuesta Nacional de Empresas Constructoras (ENEC) del INEGI se detalló que en los primeros 11 meses del año pasado, la actividad generó un total 3 mil 181 millones 860 mil pesos por la prestación de sus servicios.
Con este monto, la actividad sumaría tres años consecutivos con una tendencia a la baja, es decir, desde el 2020, lo que ha ocasionado que no recupere sus mejores niveles económicos registrados en el 2016, donde se obtuvo una cifra de ingresos de 10 mil 778 millones 027 mil pesos, lo que representa un 70.5 por ciento menos.
A manera de contexto, el instituto explica que las cifras históricas de ingresos en la construcción han sido las siguientes: en 2022 se generó una derrama económica de 3 mil 181 millones 860 mil pesos; en 2021, 3 mil 317 millones 885 mil pesos; 2020, 4 mil 174 millones 090 mil pesos; 2019, 8 mil 959 millones 024 mil pesos; 2018, 7 mil 250 millones 630 mil pesos; 2017, 7 mil 552 millones 815 mil pesos; 2016, 10 mil 778 millones 027 mil pesos, y 2015, 10 mil 450 millones 713 mil pesos.
Para 2014 la cantidad fue de 9 mil 346 millones 819 mil pesos; 2013, 6 mil 689 millones 903 mil pesos; 2012, 8 mil 328 millones 871 mil pesos; 2011, 6 mil 508 millones 370 mil pesos; 2010; 7 mil 652 millones 922 mil pesos; 2009, 7 mil 890 millones 171 mil pesos; 2008, 8 mil 870 millones 936 mil pesos; 2007, 10 mil 492 millones 406 mil pesos, y 2006, 9 mil 544 millones 346 mil pesos.
De acuerdo con el INEGI, los ingresos del sector de la construcción se ven afectados por factores estacionales, es decir, efectos periódicos que se repiten cada año y cuyas causas son ajenas a la naturaleza económica de las series.
Estas pueden ser las festividades, meses más largos que otros, las vacaciones escolares, el clima y otras fluctuaciones como la alta generación de juguetes por Navidad.
Pocas obras estatales y federales en Puebla disminuyeron los ingresos del sector
De acuerdo con Francisco Tejeda Ortega, presidente local de la Asociación Mexicana de la Industria de la Construcción (AMIC), el sector registró la peor cifra en ingresos debido a que durante el 2022 casi no se realizaron en Puebla obras estatales y federales de gran impacto económico.
Comentó que el año pasado solo se realizaron en la entidad proyectos enfocados a pavimentaciones de calles, drenajes, así como la elaboración de banquetas y guarniciones.
Sin embargo, en años anteriores hubo grandes obras como puentes, carreteras, hospitales, ciclovías, así como atractivos turísticos como el Teleférico y el Museo Barroco.
“El principal factor que veo en los datos que arroja el INEGI, es que veníamos construyendo grandes obras en el estado que nos dejaban una mayor derrama económica, sin embargo, ahora estamos sobreviviendo con los pequeños proyectos que se realizan en el estado y sus municipios”, informó.
Tras la falta de proyectos, el empresario indicó que muchas empresas constructoras han tomado la decisión de prestar sus servicios en estados donde se están realizando grandes construcciones.
Como ejemplo puso a la Ciudad de México, Quintana Roo, Yucatán y Tabasco, donde el gobierno federal destinó recursos para la construcción del nuevo aeropuerto Felipe Ángeles, la Refinería Dos Bocas y el Tren Maya.
Sobre sus expectativas para este 2023, Francisco Tejeda indicó que se prevé que sea un buen año, principalmente por la entrada del nuevo gobernador estatal, Sergio Salomón Céspedes, quien trae en su plan de trabajo grandes proyectos para impulsar el desarrollo del estado, lo que les permitirá a los constructores retornar a sus niveles de ingresos del 2019, antes de la pandemia.
“No vamos a regresar a los números de hace 16 años, pero mínimo si estaremos arriba de los de antes de pandemia, pues se prevé una buena recuperación para este año con las obras que trae en mente el nuevo mandatario estatal”, concluyó.
El sector privado abonó más a la construcción
De los 3 mil 181 millones 860 mil pesos que generó la construcción de enero a noviembre de 2022, las obras privadas fueron las que más abonaron a esta derrama económica con 908 millones 855 mil pesos.
Le siguió la edificación con 832 millones 851 mil pesos; el sector público, con 652 millones 683 mil pesos, así como el transporte y urbanización, con 552 millones 634 mil pesos.
Las dos actividades que menos dinero aportaron fueron la electricidad y telecomunicaciones con 169 millones 070 mil pesos, así como el agua, riego y saneamiento, con 65 millones 767 mil pesos.
