Después de su vida laboral, la mayoría de los padres y abuelos lograron acceder a una pensión, que es un recurso que les permite contar con un sustento para llevar su vida al retirarse, pero quienes comenzaron su vida laboral ante el IMSS después de 1997 y ante el ISSSTE después de 2007, ya no tendrán este beneficio, sino que por el contrario, deberán elegir una Afore para conservar este ahorro, a estos trabajadores se les denomina Generación Afore.
Una Afore es una Administradora de Fondos para el Retiro y consiste en una institución que tendrá la tarea, como su nombre lo dice, de administrar los recursos de los trabajadores para su retiro, cuya definición incluso se encuentra en el artículo 18 de la Ley de los Sistemas de Ahorro para el Retiro, esto luego de que a finales de la década de los 80 el sistema de pensiones en México estuviera bajo el control del IMSS.
¿Cuáles son las ventajas de pertenecer a la Generación Afore?
En lo que respecta al resguardo de los recursos, mientras los recursos de las pensiones eran ingresados a una cuenta concentradora, en el caso de las Afores este se hace en cuentas individuales para cada trabajador, teniendo cada persona la posibilidad de elegir la institución que quiere que administre sus recursos, sin que el patrón o el gobierno pueda determinar lo contrario.
Estas administradoras no simplemente resguardarán los recursos como sucedía con la pensión, sino que, al recibir las aportaciones del empleador, el gobierno y el empleado ingresa los recursos de cada una de las cuentas en diversos instrumentos financieros como acciones, bonos y fondos de inversión con la intención de multiplicar la suma al momento de llegar al retiro.
Otro beneficio radica en el hecho de que cada trabajador fija la cantidad que quiere recibir al momento de retirarse, por lo que puede incluso ser mayor al promedio, además de que incluso los montos extras que son aportados por el empleado pueden ser deducibles de impuestos, lo que también implica un beneficio extra al tratarse de una reducción de la carga tributaria.
¿Qué desventajas tiene pertenecer a la Generación Afore?
Dentro de las desventajas es que en el caso del IMSS se debe contar con al menos 60 años cumplidos y 800 semanas de cotización, además de que la pensión mensual dependerá del saldo acumulado en la cuenta individual, mientras que el caso del ISSSTE es necesario tener al menos 60 años de edad y 25 años de servicio, calculando el monto de la misma manera que el caso anterior.
A los puntos en contra se suma el hecho de que no se pueden realizar cambios constantes de institución bancaria, sino que este proceso sólo se puede hacer una vez al año, además de que para disponer de los recursos en una situación extraordinaria como desempleo se debe de cumplir una serie de requisitos antes de acceder al dinero y no se recibe cualquier monto.
Finalmente, lo importante al buscar una Afore es elegir la que mejor se adapte a las necesidades del trabajador, además de planear desde temprana edad el retiro para aportar los montos necesarios y poder tener una jubilación con las mejores condiciones, cuidando también que el empleador esté cumpliendo con su parte con acciones como el salario registrado ante el IMSS.