Enriqueta Jiménez, mejor conocida como La Prieta Linda, falleció a los 88 años en la Ciudad de México este 21 de septiembre. Reconocida actriz y cantante de la “Época de Oro” del cine mexicano tiene entre sus grandes logros haber descubierto a una de los grandes compositores que ha tenido México: Juan Gabriel.
La carrera del llamado Divo de Juárez no sería la misma de no ser por La Prieta Linda, al ser una de las primeras personas que confió en su talento. Durante uno de los momentos más duros en la vida del cantante, su encuentro dio pie a lo que sería una de las carreras más exitosas de la historia. Junto a su propia, la huella que dejó Queta Jiménez será siempre recordada.
¿CÓMO SE DIO SU ENCUENTRO CON JUAN GABRIEL?
Los primeros intentos por Alberto Aguilera Valadez, nombre real de Juan Gabriel, de conseguir una carrera artística se dieron desde 1966 cuando se presentó en un programa de Ciudad Juárez bajo el nombre artístico de Adán Luna. Pese a esto, solo encontró rechazo de parte de las disqueras y nadie parecía confiar en él.
Todo parecía ir al peor escenario cuando, al año siguiente, fue acusado de robar varias joyas y una radio a la actriz Claudia Islas. Esto lo llevó a ser detenido y pasar 18 meses en la prisión de Lecumberri. Su vida cambiaría gracias a Enriqueta Jiménez, quien en una visita a la cárcel lo conoció y pudo escucharlo cantar.
Su encuentro se pudo dar debido a Queta tenía lazos con el director del penal, el general Andrés Puentes Vargas, al ser cuñado de su hermana. Era sabido también que Andrés Puentes sacaba a Juan Gabriel de la cárcel en ocasiones para llevarlo a cantar a fiestas.
“Cuando lo miré, pues era un muchachillo flaco. Me lo presentaron y en cuanto me miró, me dijo: ‘Yo tenía ganas de verte‘. Empezó a llorar y yo también”, contó Jiménez sobre el momento en que se conocieron. Debido a su talento, fue una de las personas que ayudó a pagar la fianza del cantante para que saliera en libertad.
JUAN GABRIEL Y SU RELACIÓN CON QUETA JIMÉNEZ
Como forma de pago a la confianza que La Prieta Linda tuvo en él, el compositor decidió obsequiarle una canción. “Noche a noche” convirtió a Jiménez en la primera de grandes estrellas de la música que grabaron canciones del Divo de Juárez. Por su parte, Jiménez se convirtió en la madrina musical del cantante.
Su primer encuentro también quedó inmortalizado en la película “Es mi vida”, dirigida por Gonzalo Martínez Ortega en 1982. En ella, Queta Jiménez se interpreta a sí misma y escucha en una oficina de la prisión cantar a Juan Gabriel quedando fascinada con su talento.
Ellos siempre se mantuvieron en contacto teniendo una profunda amistad. Incluso, se llegó a especular que el cantante siempre estuvo enamorado de ella y le propuso tener una relación, pero solo lo veía como amigo. Esta se convirtió en una de sus grandes decepciones, pero siempre tuvieron claro cómo era su relación.
“Él y yo hicimos un pacto, éste fue que yo respetaría su vida privada siempre ante los medios de comunicación”, relató Enriqueta. “Cuando ya era medio famoso, me dijo ‘No vamos a hablar de dónde estuve, de si hice o no hice, vamos a hablar de mi música, canciones’ Y así lo hicimos. Lo recibieron en la compañía donde yo grababa, y empezó a despuntar solito, gracias a su talento”.
LA CARRERA DE "LA PRIETA LINDA"
Enriqueta Jiménez es la hermana menor de Flor Silvestre y realizó su debut en el espectáculo en 1957. Junto a su hermana formó un grupo musical llamado “Las Flores”. Grabó un total de 40 discos y apareció en 15 películas, siendo su papel de Carmen en la cinta “Valente Quintero” de 1973 junto a Antonio Aguilar uno de los más recordados.
Antonio Espino “Clavillazo” fue quien le dio el apodo de La Prieta Linda y en su comienzo fue cantante del Mariachi Vargas de Tecalitlán, apenas con 14 años. Dentro de sus grandes éxitos, se encuentra el disco “Lo Mejor de Juan Gabriel en la voz de La Prieta Linda”, lanzado en 1990.