Tras la liberación del delegado de Bienestar en Chignahuapan, Alfredo Fernández, así como de la esposa y el guarura de “El Negro”, el gobernador Miguel Barbosa Huerta acusó la probable colusión de jueces con el crimen, ya que éstos declararon ilegal la detención bajo consideraciones subjetivas.
Por una parte, explicó que una jueza de control dejó “ilegalmente” en libertad a Alfredo Ramírez y por este hecho se presentará una queja ante el Consejo de la Judicatura, dijo que aun cuando el gobierno del estado tiene una lucha contra el crimen, hay Ministerios Públicos y jueces que “se coluden”.
Alfredo Ramírez fue detenido el fin de semana pasado, durante un recorrido que realizaban elementos de seguridad revisaron su vehículo, en el que encontraron una escopeta y no contaba con el permiso correspondiente; además, se le ubicó dentro del Atlas Criminal por otros antecedentes delictivos.
Asimismo, Miguel Barbosa afirmó que por consideraciones subjetivas, una jueza dejó en libertad a la esposa y el guarura de Marco Antonio N. “El Negro”, un líder narcomenudista; explicó que en su audiencia se declaró ilegal la detención “dijo que no era lógico ni creíble que a esa hora se vendiera droga y tan cerca de su casa, por ejemplo”.
De este modo, señaló que se establecerán los hechos y se determinará si los jueces y Ministerios Públicos están actuando con legalidad o existe algún tipo de colusión con grupos o personajes dedicados a delinquir.
“La colusión no solamente es de policías, también es de jueces, de juezas, de ministerios públicos, conmigo no van a jugar, de acuerdo, esa es la situación, una jueza lo dejó libre, pero eso no significa que no tenga responsabilidad, ese señor está más coludido y si una jueza lo dejó libre, la justicia lo va a encontrar”, afirmó.
Barbosa Huerta mencionó que hay vigilancia en todos los municipios del estado y en esta actividad se han descubierto autoridades coludidas con el crimen, mismas que están detectadas y con las que se busca cortar cualquier tipo de relación corrupta.