Hace un año, Andrea Lezama, líder de la Colectiva Madres Exigiendo Justicia por la Violencia Vicaria y la primera mujer que logró en Latinoamérica vincular a proceso a un hombre por este delito, supo el paradero de su hijo. Este hecho, impulsó a más mujeres a alzar la voz y a seguir denunciando esta violencia a pesar de que las autoridades siguen sin estar capacitadas al cien por ciento para atenderla.
Andrea recordó que después de localizar a su hijo en Baja California Sur, las autoridades lo resguardaron en el DIF de aquella entidad y fue ahí donde le brindaron ayuda psicológica y en donde pudo tener el primer contacto vía remota. Luego de varias semanas, el niño viajó a Puebla y desde ese entonces ya está con la activista.
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Andrea compartió a este medio que tener a su hijo de vuelta es como volver a ser madre, pues su vida dio un giro de 360 grados y este año, por primera vez lo llevó a la escuela, asistió a sus festivales y aunque en muchos casos de violencia vicaria la vinculación entre la madre y el menor lleva mucho tiempo, en este caso no fue así, en un lapso corto el menor mostró cariño y se fue acoplando muy bien.
La madre de Andrea es quien la ayuda a cuidarlo mientras ella trabaja y el menor está fascinado con la atención que recibe tanto de su madre, como su abuela. No obstante, sigue en atención psicológica, ya que estuvo separado de su madre por 8 años. Fue el 20 de octubre del año pasado cuando Andrea supo que las autoridades habían encontrado a su hijo y ahora que se cumplió un año, publicó lo siguiente:
“El 20 de octubre se cumple un año de que encontraron a mi bebé y a los tres días fue la audiencia porque trasladaron al papá a Puebla, ahí fue donde lo vincularon”, recordó. Es preciso mencionar que este hombre fue el primer vinculado a proceso por violencia vicaria en Puebla, México y en toda Latinoamérica.
“El 20 de octubre es uno de los días más importantes y especiales en mi vida, un día que guardaré eternamente en mi corazón. Un día como hoy, pero del 2022, después de más de seis años, la esperanza regresó a mí, mi hijo había sido localizado y ahora sí, podríamos estar juntos nuevamente”, agregó en sus redes sociales.
La mujer que ahora es activista también aprovechó para dedicarle unas palabras a su hijo: “Mi bebé, cada noche le pedía a Dios que te cuidara y me ayudara para estar nuevamente contigo. Cada día en mi mente y mi corazón te decía que pronto estaríamos juntos. Hoy despierto y tengo la dicha de mirarte a mi lado, de verte crecer, de escuchar tu voz y de tomar tu manita”, fue parte del texto.
Este caso hizo que más mujeres se atrevieran a denunciar violencia vicaria y les dio esperanza de que algún día volvieran a tener a sus hijos. No obstante, Andrea lamentó que sigan revictimizando a las mujeres y que las autoridades no estén capacitadas al 100 por ciento en cuanto a este delito.
