Debido a la actual disminución hídrica de la presa Manuel Ávila Camacho (MAC), esto en comparación con 2022, la Comisión Nacional del Agua (Conagua) recortó de tres a dos regadíos y redujo 40 por ciento el volumen de extracción para 2023. Esto significa que las compuertas del embalse se abrirán sólo en dos ocasiones durante los próximos meses y los productores recibirán menos agua para regar sus cultivos que un año atrás.
Mediante un comunicado enviado a la Redacción de El Sol de Puebla, la dependencia federal confirmó que ayer inició oficialmente la etapa de distribución del Plan de Riego 2022-2023. Así, se validó que la presa MAC, también conocida como Valsequillo, dotará de agua a los poco más de 18 mil usuarios del Valle de Tecamachalco en las próximas semanas.
Precisó que el embalse reparte actualmente un volumen de 39 metros cúbicos por segundo (m³/s). Y aunque puede amplificarse dicho volumen a petición de los usuarios, para llegar hasta 49 m³/s –que es la capacidad de entrega y apertura de la presa–, señaló que sólo se otorgará el monto aprobado para el año.
Al respecto, detalló que la cantidad autorizada de extracción para 2023 se redujo 40 por ciento, en comparación con 2022. El año pasado, la Conagua distribuyó 265 mil 038 millones de metros cúbicos de agua (Mm³), y lo hizo en tres regadíos, pero en 2023 esa cifra será de 189 mil Mm³, habiendo una reducción significativa de poco más de 76 mil Mm³.
En contraste, lo que creció fueron los usuarios del distrito de riego 030, ya que el año pasado la dependencia federal contabilizó 13 mil de ellos y actualmente se detectaron 18 mil 066 usuarios.
En el documento también se puntualizó que hay por lo menos cinco alimentos cuya cosecha es posible gracias al agua que llega a través de los seis módulos de riego que tiene la presa de Valsequillo en la región. En ese sentido, las hortalizas de mayor importancia son maíz, chile, frijol, sorgo y alfalfa.
La Conagua también hizo hincapié en que la reducción del volumen de extracción hídrica aprobado para 2023 se decidió conjuntamente con los representantes de los seis módulos del embalse, así como con el Comité Hidráulico. Estos organismos se componen de autoridades municipales, campesinos, especialistas y funcionarios locales.
“Con estas acciones, Conagua refrenda su compromiso de trabajar de la mano con los usuarios para garantizar una administración hídrica transparente, que permita coadyuvar en la seguridad alimentaria de la población”, subrayó la dependencia.
Cabe recordar que, según académicos, como el doctor en Ingeniería Química de la Universidad Popular Autónoma del Estado de Puebla (UPAEP), Francisco Javier Sánchez Ruiz, 2023 será el año más crítico para el distrito de riego 030. Lo anterior debido a que, en los últimos 50 años, no se habían observado niveles tan bajos en la presa MAC antes de iniciar un ciclo de riego.
Según datos de la Conagua, hasta la semana pasada el embalse estaba al 69.85 por ciento de su capacidad, por lo tanto, esta cifra decrecerá en las próximas semanas.
Cabe recordar que, durante marzo de 2022, antes de que se abrieran las compuertas de la presa, el embalse estaba al 99.5 por ciento de su capacidad, y aún así el año pasado dicho cuerpo hídrico alcanzó sus niveles más bajos de la última década, al presentar una capacidad inferior al 20 por ciento, en julio.
Minimiza titular de SDR disminución de niveles en Valsequillo
El martes pasado, poco después de concluida la rueda de prensa del gobernador Sergio Salomón Céspedes Peregrina, la secretaria de Desarrollo Rural (SDR) del estado, Ana Laura Altamirano Pérez, aseguró que no hay motivos para aventurarse y prever afectaciones a los cultivos del Valle de Tecamachalco, derivadas de la contrastante realidad que evidencia la reducción de agua en la presa de Valsequillo, en comparación con 2022.
Tras ser cuestionada por El Sol de Puebla sobre las previsiones que la dependencia tiene para subsanar posibles daños a las hortalizas que son beneficiadas con el líquido que desciende del embalse, la funcionaria dijo que hay una bolsa para la atención de desastres, sin embargo, minimizó que la sequía en esa región simbolice un riesgo alto para la producción agrícola en la entidad.
Lo anterior debido a que, refirió, apenas ocho mil hectáreas son regadas con el agua de la presa MAC, y en el estado existen un millón de hectáreas.
“Es una superficie pequeña, son ocho mil hectáreas las que se riegan con esa presa, en Puebla tenemos un millón de hectáreas, de las cuales 160 mil son de riego, entonces, prácticamente es una pequeña parte (…) Los productores siguen con sus procesos productivos, o sea, en este momento, no tenemos algo que nos diga que van a dejar de sembrar hortalizas”, expuso entonces.
No obstante, la información de la Conagua contrastó a la titular de la SDR, pues, según datos oficiales, hay alrededor de 20 mil 400 hectáreas de siembra en el Valle de Tecamachalco a las que llega el líquido del embalse.
Finalmente, es importante consignar que El Sol de Puebla constató en semanas pesadas los sentires y preocupaciones de varios productores agrícolas de esa región. Todos ellos coincidieron en que 2023 será un año crucial para el campo, pues en 2022 algunos de ellos perdieron hasta 60 por ciento de sus cultivos a causa de la abrasadora sequía que impactó al país entero. Actualmente, con la reducción del volumen de extracción, muchos campesinos tuvieron que recortar su proyección de cosecha hasta en 50 por ciento.
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