A unos meses de entrar al último año de gobierno de los presidentes municipales de Puebla, el Gobierno del Estado no insistirá en asumir el control de la Secretaría de Seguridad Ciudadana en el municipio de Puebla, pues el gobernador, Luis Miguel Barbosa Huerta, afirmó que continuará con su estrategia de seguridad con o sin la colaboración del Ayuntamiento.
Para el mandatario, los alcaldes ya no podrán cambiar en su último año la cara del gobierno que implementaron en sus primeros dos años y por lo tanto la única opción de la administración estatal es continuar con su estrategia de seguridad.
“Ya vamos al último año de los ayuntamientos, nadie pude decir que va a perfilar un nuevo rostro de los gobiernos en cada ayuntamiento, ya fue lo que fue, no hay ya otra forma de lo que ha sido, entonces a mi gobierno le toca ser responsable de la seguridad en el estado, que debiera tener la colaboración de todos los ayuntamientos, sí, pero si no es posible no me voy yo a detener y la capital del estado es un asunto muy importante para nosotros y vamos a seguir trabajando”.
Barbosa Huerta consideró importante el decreto para asumir la seguridad en la capital, pero consideró que las autoridades municipales lo usan para “victimizarse” y utilizarlo como parte de una estrategia política.
“Sería un elemento muy importante, sí lo es, solamente que está visto que lo quieren para formar una estrategia política, para victimizarse, para generar una condición de persecución”.
Dicho decreto fue publicado el pasado 13 de julio en el Periódico Oficial del Estado, con una modificación al original que establece un plazo de un año para que el gobierno estatal se haga cargo de la seguridad en el municipio, pero hasta la fecha no ha sido puesto en marcha por el Ayuntamiento de Puebla.