Ropa, zapatos, troncos y demás desechos son el principal factor de obstrucción ante las fuertes lluvias que se registran año con año en la entidad poblana, lo que en muchas ocasiones deriva en inundaciones y daños colaterales a las viviendas aledañas.
Durante un recorrido realizado por El Sol de Puebla, se observó cómo los montones de basura provocan inundaciones una vez que se presenta una fuerte tormenta. Tal es el caso del Vaso Regulador El Puente Negro ubicado en la Diagonal Defensores de la República y Adolfo López Mateos.
De acuerdo a los vecinos de la zona, el vaso regular ha quedado bloqueado por tanta basura, la cual es arrastrada por el río San Francisco que nace en La Malinche, cruza el estado de Tlaxcala y Puebla a lo largo de más de 300 kilómetros por encima de la superficie terrestre.
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Éste al llegar al vaso regulador del Puente Negro continúa su camino por el subsuelo, mismo que ha quedado taponado por llantas, ropa, pelotas, troncos y demás desechos que llegan con las fuertes lluvias, lo que provoca un desbordamiento.
Por tanto, los colonos acusan que no hay participación oportuna de las autoridades municipales, ya que “no sirve de nada que pongan camaritas” si eso no ayuda a prevenir que el agua se desborde y entre a los hogares cercanos.
Es en ese tenor que urgieron una intervención eficaz, ya que el problema es que nadie ayuda a la limpieza de la barranca y con la primera lluvia salen a relucir los motones de basura que son el verdadero problema.
“El problema no es la cámara, es la basura, va a sonar la chicharra y qué, qué hacemos, esto sube y se tapa, nadie le pone atención a esta barranca, a nadie le interesa que suene o no la alarma”, dijeron.
Por si esto fuera poco, durante el día con temporadas altas se desprenden olores fétidos del agua encharcada, pues es ahí donde se concentran desechos y agua del drenaje.
La situación es similar en el puente del Colapso Alseseca, pues cuando llueve de manera constante y fuerte, el cauce alcanza más de 10 metros, lo que genera un riesgo a las casas que se encuentran alrededor.
Esto se suma, además, al peligro que corren los automovilistas que transitan por el puente, pues cuando el agua sobrepasa los niveles normales, los coches que circulan en el momento son vulnerables a ser arrastrados.
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Es en este lugar ubicado en el Camino al Batan donde destaca de entre todos los desechos un tronco, el cual fue arrancado de raíz y por la fuerza del agua quedó atorado entre la estructura del puente de concreto, lo que obstruye de manera considerable la fluidez del agua y esto conlleva a una inundación.
Ante esto, las autoridades correspondientes no han emitido información acerca de la limpieza de estas zonas o desazolve de las mismas, por lo que son un peligro latente una vez que las nubes se oscurecen y dejan ver una fuerte tormenta.
