Él es Carlos, el primer paciente con trasplante de riñón en Puebla

Han pasado 29 años del procedimiento que duró nueve horas

Pilar Pérez

  · lunes 29 de octubre de 2018

Carlos Sandoval Cordero fue el protagonista de uno de los cambios más importantes del Hospital de Alta Especialidad “San José” al convertirse en el primer paciente trasplantado de riñón en Puebla cuando tenía apenas 27 años de edad en 1989, ya que sufría insuficiencia, por lo que estaba sometido a un proceso de diálisis.

Pasaron 29 años desde entonces a pesar de que, al ser el primer procedimiento de este tipo en el nosocomio, estimaron que el paciente tendría un promedio de vida del alrededor de una década; sin embargo, superó tres.

En conferencia de prensa especialistas dieron a conocer que en casi tres décadas se han realizado un total de mil 649 trasplantes renales en esta sede. Cuando se llevó cabo la cirugía el 21 de febrero de 1989, los médicos tardaron nueve horas en el procedimiento; actualmente el equipo de transplantólogos dilata alrededor de cinco.

El paciente, que hasta apenas tuvo una recaída y está en un nuevo proceso de trasplante, recuerda a la perfección cómo fue elegido de entre una lista de enfermos para que le practicaran esta cirugía. La donadora fue su hermana Carmen, con quien tiene un vínculo especial.

A unos meses de que se cumpla la tercera década de este procedimiento, logró reunirse la mayor parte del equipo que formó parte de la evolución del nosocomio. El especialista responsable de la cirugía fue Javier Moreno Reyes, mientras que el director del nosocomio en ese periodo fue Rolando Jaime Revilla.

El exdirector del nosocomio recuerda con claridad que aquel día llegaron los residentes al nosocomio y se realizaba la ceremonia de recepción;, sin embargo, él estaba tan nervioso que decidió perderse el acto protocolario con la intención de estar pendiente del procedimiento del trasplante.

Actualmente, en el Hospital de San José hay alrededor de mil 250 pacientes en lista de espera de un riñón, por esta razón, los especialistas reunidos que trabajaron en ese entonces, igual que los actuales, mantienen el llamado a la población para que se sensibilicen con la cultura de la donación cadavérica de órganos, la cual puede salvar muchas vidas.

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