Personal del Instituto Tecnológico Superior de Zacapoaxtla, una institución educativa que ha estado en conflicto desde octubre del año pasado, denuncia diversas inconformidades relacionadas con la forma en que se trata a los trabajadores y se afectan sus derechos laborales. Esto lo expresaron durante una entrevista, la cual fue respaldada con documentos, evidencia fotográfica y copias de correos electrónicos que presentaron como prueba.
La inconformidad más reciente tuvo lugar el pasado jueves 11 de enero, cuando la jefa del departamento de materiales del Tecnológico Nacional de México, Campus Zacapoaxtla (nombre con el que actualmente se identifica a esta máxima casa de estudios), identificada por la fuente como Josefa Vásquez Méndez, aparentemente siguiendo indicaciones del actual director Miguel Choy López, informó a cuatro trabajadores que su modalidad laboral había cambiado. Además, les comunicó que, para recibir su pago, debían emitir facturas a nombre del Instituto, con un plazo de solo cuatro días (que venció el pasado 17 de enero) para llevar a cabo este trámite y así poder recibir el pago correspondiente a la semana del ocho al 12 de enero.
Durante este periodo, el pago de su salario devengado estuvo detenido, y aunque la manifestación logró que se les pagara bajo el antiguo esquema, las recomendaciones de los directivos y jefes de la institución no cambiaron. A pesar de la movilización y la colecta de apoyo a los trabajadores, continuaron las intimidaciones y la indicación de seguir con los cambios.
Según las fuentes entrevistadas, la intención del cambio de régimen era que los trabajadores firmaran un contrato como proveedores en lugar de como empleados, a pesar de tener más de 10 años de antigüedad. También se les indicó que su salario estaría sujeto al pago de impuestos, lo cual ya de por sí representa un nuevo atentado, ya que su pago diario es de 220 pesos, mientras que el salario mínimo es de 248.93.
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En la entrevista, las fuentes señalaron que los trabajadores en esta condición no han disfrutado de vacaciones, aguinaldo, prima vacacional, prima de antigüedad, estímulos económicos ni apoyos para despensa. Además, no han sido dados de alta en el Instituto de Seguridad Social al Servicio de los Trabajadores del Estado de Puebla. No cuentan con contrato por escrito, sus salarios sufren descuentos por retardos, no tienen acceso a sus recibos de pago y cubren sus gastos médicos en situaciones de graves problemas de salud. Tampoco reciben pago por horas extras, a pesar de que, según el departamento de recursos humanos, no se pagan, pero sí son exigidas.
En la conversación, las fuentes señalaron que los trabajadores han solicitado audiencia con el director general para detener todas estas arbitrariedades contra sus derechos laborales, decisión que ha sido negada en diversas ocasiones. En lugar de ello, solo reciben malos tratos, intimidaciones y amenazas de despido por parte de Vásquez Méndez, su jefe inmediato.
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"De manera amplia, el personal que trabaja en el sector educativo y la base trabajadora en general del país ha visto con buenos ojos las iniciativas del Gobierno Federal en cuanto a materia laboral se refiere, como la propuesta de la reducción de la jornada laboral a 40 horas, que los trabajadores reciban una pensión al jubilarse, la ampliación del periodo vacacional, la reforma a la subcontratación de personal, la reforma sindical y, desde luego, el aumento al salario mínimo general... Sin embargo, la burocracia del Instituto Tecnológico Superior de Zacapoaxtla (ITSZ) gusta de hablar de apego a la normatividad, reglamentos y decretos para justificar la omisión y violación de los derechos y prestaciones laborales de las y los trabajadores contenidos en la Ley Federal del Trabajo; a pesar de que todo patrón está obligado a su cumplimiento, incluso si se trata de una entidad pública, esto es una verdad incongruencia", afirmaron.
