ZACATLÁN, Pue.- Ante las irregularidades cometidas por el juezJuan Carlos Malpica, en el juicio contra dos de los asesinos delagente del Ministerio Público federal Isaí Hernández Villegas,ocurrido el 31 de agosto de 2014, y que dio paso al primer juiciooral por homicidio ocurrido en la Sierra Norte de Puebla, LilianaLira Laguna, testigo presencial y víctima de las agresiones quetambién infligieron contra su marido y que derivó en su posteriorfallecimiento, denunció más irregularidades en este proceso,incluso cuando intentó interponer su queja, por lo que promovióuna serie de amparos que ya fueron radicados.
Según explicó, las quejas se desbordaron tras la liberaciónde dos de los implicados en ese homicidio; con este antecedente–el pasado 9 de enero– intentó ingresar la queja contra eljuez y ni siquiera quisieron aceptarla, con el argumento de que esaqueja no argumenta nada, aun cuando ese recurso lo fundamentó conel marco jurídico vigente, pruebas y otras formalidades legales,por lo que promovió un amparo que le permita la admisión de suqueja, toda vez que la inadmisión no corresponde a algunaargumentación o fundamentación viable, de acuerdo al propioreglamento que hay para ese efecto.
"Todos estos hechos solamente manifiestan que están coludidos.El día que fui a presentar mi queja no la querían admitir, medicen que la Comisión no estaba integrada todavía, aun cuandoargumenté el artículo 154 del reglamento que establece que habráuna Comisión que vigilará el actuar de la gente del tribunal; larecibieron, pero la rechazaron de plano, sin siquiera ver el videoy demás elementos que integré como prueba", se quejó laentrevistada.
Abundó que su petición a la justicia federal es que le admitanesa queja, razón que da sentido al amparo presentado, queargumenta el sentido que tendría respetar la ley orgánica delPoder Judicial; añadió que pareciera están protegiendo a susjueces porque, según pudo observar en las sentencias de otroscasos, quejas presentadas contra otros jueces eran rechazadas o nofavorables, la mayoría desechadas por improcedencia, falta deargumentación y demás.
En cuanto a la queja administrativa, quedan pendientes losrecursos que está haciendo en la apelación, porque ahíratificará que el juez actuó negligentemente, porque no le dejóespacio en la audiencia para dar su testimonio, no dabainformación y fue grosero, entre otras negligencias que señalóen su oportunidad.
Hasta tuvo que recurrir a jurisprudencia aplicable sobre laspruebas de no vinculación que el juez está argumentando y que nohan sido consideradas en sus alegatos. También lamentó laactuación que ha tenido la Comisión de Derechos Humanos en elestado de Puebla, una vez que interpuso su queja ante la ComisiónNacional de Derechos Humanos, organismo que la turnó a suhomólogo en la entidad poblana y que le contestó un año despuéscon una resolución que no satisfacía al sentido de su queja. Pararespaldar su dicho, la entrevistada compartió esa resolución coneste reportero.