Ajalpan, Pue. Tres hogares ubicados en el barrio de Fátima en el municipio de Ajalpan lloraron este lunes la pérdida de su familiar tras el accidente de peregrinos de este fin de semana; de origen humilde, cada una de las familias no daba crédito de lo ocurrido y no esperaban que el viaje a la basílica de Guadalupe en la Ciudad de México terminaría en una desgracia; así mismo, se mantienen preocupados por los lesionados que aún se encuentran graves y bajo atención médica.
Durante la mañana y tarde de este lunes, los cuerpos de Flavio Vicario Gegchi, Tomas Feliciano Quixtiano y Juan Romero Rodríguez, de 42, 50 y 47 años de edad respectivamente fueron trasladados por una empresa funeraria bajo la custodia de la Policía Municipal hacia el barrio de Fátima, donde padres, esposas e hijos recibieron a sus seres queridos, ya sin vida.
Cabe destacar que este grave accidente que se registró cerca de las 07:00 horas en kilómetro 39 de la autopista México-Puebla, a la altura de Ixtapaluca, Estado de México, generó incertidumbre en el municipio tras la noticia de que un autobús con habitantes de esta ciudad había volcado a pocos kilómetros de llegar a su destino, por lo que familiares comenzaron a recibir llamadas de quienes lograron sobrevivir o fueron testigos del hecho, informando la muerte de tres pasajeros y de varios lesionados.
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Humildes y fervientes a la virgencita
Flavio Vicario Tegchi fue uno de los tres fallecidos, un hombre de 42 años de edad, soltero que desde temprana edad había mantenido un acercamiento a la iglesia, siendo parte de la Fraternidad Regional Jufra San Juan Bautista, por lo que su gusto por la religión católica, lo llevo a ser desde hace algunos años rezandero, siendo este el motivo por el cual, era una persona muy querida en la ciudad.
Trabajador de una maquiladora en esta ciudad, vivía junto a sus padres, los cuales en esta ocasión no lo acompañaron a este viaje; sus hermanas mencionaron que él viajaba en un camión diferente al que volcó, solo que, por alguna razón en una parada, decidió cambiarse de unidad, cuando les avisaron que la unidad blanca se había accidentado, nunca imaginaban que ahí su hermano había perdido la vida.
Tomas Feliciano Quixtiano de 50 años de edad, de oficio albañil, viajó acompañado de su esposa, su hijo y nieto de 5 años de edad, el perdió la vida y el menor su pierna; su hermana Rosalinda Quixtiano, dijo que era una ilusión llevar al pequeño ante la virgen, su “bebito”, como así se refirió del menor, ya iba al preescolar y lamentaba que haya quedado marcado para toda la vida.
De la misma manera, Juan Romero Rodríguez, de 47 años de edad, fue parte de este viaje acompañado de su hijo, siendo él mismo quien habló su familia, para explicarle que habían sido parte de un accidente en el camión en el que viajaban y que desafortunadamente su padre había perdido la vida, y que su hijo de 3 años de edad había perdido su brazo.
Los tres hogares comparten la tristeza de la manera en que perdieron la vida, durante la noche los cuerpos fueron velados y será en el transcurso de esta tarde de martes, cuando se lleve a cabo la misa de cuerpo presente en la Iglesia San Juan Bautista, para posteriormente darles cristiana sepultura en el panteón principal de esta ciudad.
