Tehuacán. – Una serie de presuntas inconsistencias en un proceso penal han mantenido a un joven señalado como parte de una banda de secuestro en prisión durante más de cinco años sin un juicio. La desesperación de su esposa y su hermano por liberarlo los llevó a hacer pública esta detención, confiando en que la Fiscalía General del Estado (FGE) revisará el caso y, según explican, entenderá que se trató de un abuso.
El 25 de enero de 2019, José Barquín Cruz estaba celebrando el nacimiento del bebé de su cuñado en una reunión con otros invitados en un domicilio ubicado en la Colonia Tepeyac. Horas después, hombres armados ingresaron diciendo ser integrantes de un cartel, deteniendo a cuatro hombres que se encontraban allí, mientras que a las mujeres y menores las retuvieron en una habitación.
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Mientras eran golpeados, escucharon que eran de la Fiscalía de Investigación de Secuestros y Delitos de Alto Impacto (FISDAI). Minutos después, comenzaron a disparar en el exterior simulando un enfrentamiento. Ante la presencia de medios de comunicación y policías locales, indicaron que se trataba de un operativo, llevándose a los cuatro varones y a uno más que llegó a preguntar por su hermano.
Han pasado más de cinco años y medio, y José sigue en el penal de esta ciudad mientras su familia ha vivido un “infierno”. Inconsistencias en la carpeta señalan que hizo una llamada para cobrar un rescate, que su detención fue en la carretera de Francisco I. Madero y que era parte de una banda delictiva. Sin embargo, su familia afirma que ni él ni al menos otros tres detenidos son delincuentes.
Adolfo Barquín Cruz, hermano de José, refirió que al parecer uno de los invitados mantenía relaciones con un grupo delictivo y que, al seguirlo, detuvieron a su hermano y sus dos amigos, los cuales no tenían relación con el objetivo de la FISDAI. Ante las inconsistencias del proceso, en varias ocasiones han echado atrás amparos y el proceso, hasta hace seis meses, volvió a iniciar.
Hoy necesitan una revisión de tres jueces, a casi seis años, y habiendo perdido todas sus pertenencias, se ven en la necesidad de pedir la atención del fiscal general del estado, Gilberto Higuera, para que se realice una revisión de este hecho. De acuerdo con lo relatado por los familiares, se han hecho peritajes, se ha comprobado que ninguno de ellos tiene antecedentes o relación delictiva y no hay nadie que los señale.
Esmeralda Pacheco Díaz, esposa de José, dijo que han vendido todo y que sus tres hijos menores de edad han vivido sin su padre durante estos más de cinco años. Han confiado en el sistema de justicia, pero el tiempo pasa y al ver que todo se detiene y ya no tener dinero, se ven en la necesidad de solicitar públicamente ayuda.
Señalan que en la carpeta de investigación 24/2019/FISDAI se detallan cada uno de los abusos y mentiras que los elementos declararon, armando un "chaleco" para relacionarlos con una banda delictiva. Hay un amparo en proceso, el 1005/2023 en el Juzgado Primero de Distrito, en el que piden una prisión domiciliaria mientras logran declararlo inocente.
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Pedimos justicia, queremos que se lleve a cabo su proceso y que se valoren las pruebas periciales presentadas. Confiamos en que las autoridades prestarán atención a este caso, recalcando que José es inocente y que no cometió ningún delito. Su padre murió dos años después de su detención y ahora una enfermedad que aqueja a su hija mayor los hace implorar por su libertad.
