A casi 10 años de haber quedado inoperante, la planta de tratamiento de Acatlán de Osorio no ha podido ser reparada por ninguno de los gobiernos municipales y estatales que han pasado durante ese tiempo.
Actualmente, el inmueble sigue sacando aguas negras sin filtrar, las cuales se van directamente al río Tizaac que pasa por este municipio.
El río en este momento se encuentra seco, pero es desde el punto en que se encuentra la planta tratadora donde se observa el escurrimiento de agua, pero ésta es únicamente la que brota del drenaje, expidiendo un olor fétido y contaminando los pozos cercanos al afluente que en su mayoría sirven para regar los sembradíos que están cercanos, principalmente de maíz.
La planta tratadora dejó de funcionar desde al año 2014 y a pesar de que ha sido una promesa de campaña, ésta no ha sido puesta en marcha.
Han llegado incluso empresas privadas para echar andar la planta tratadora, pero hasta ahora no se ha visto una mejora de la misma, por lo que sigue sacando agua negra al río Tizaac, dañando también el medio ambiente.
Algunos ciudadanos de la comunidad de Amatitlán que pertenece al municipio de Acatlán, han reportado que hay veces que se reportan personas enfermas por el fuerte olor fétido que expide el río, ya que a la altura de su comunidad el afluente ya se encuentra contaminado.
Cabe mencionar que el pasado 28 de abril de este 2023, el gobierno municipal de Acatlán, a través de sus redes sociales, dio a conocer que personal de CEAS Puebla, así como Obra Pública Municipal y Sosapama, llevaron a cabo una inspección y verificación de la Planta Tratadora de Aguas Residuales.
La finalidad de las acciones, se dijo, era buscar una solución a la problemática del tratamiento de aguas residuales y que durante la inspección se habían hecho diversas pruebas y análisis para evaluar el estado actual de la planta.
Tras la visita del personal especializado, nunca se dieron a conocer los resultados, ni que medidas han implementado para mejorar la calidad de agua que sale de la planta tratadora.
