CUETZALAN DEL PROGRESO, Pue.- Todo listo para que hoy sábado sereanude el ritual de los Voladores de Cuetzalan, una vez querevisaron las condiciones del palo en el que se celebrará esteritual ancestral; por seguridad y cumpliendo con lo acordado con elalcalde, Óscar Paula Cruz, sólo cortaron 3 de los 33 metros delmadero que ofrece las garantías para los protagonistas de esaceremonia.
"Hicimos el mantenimiento, se cambiaron los tablones y se hizouna nueva base", dijeron miembros del grupo de voladores"Caballeros Águila" que se presentarán este sábado.
Como son varios los grupos que se estarán presentando, seacordó el orden en el que estarían presentando esta ceremonia, detal manera que desde hoy sábado y hasta el domingo de la próximasemana, todos los días, habrá vuelos.
De este modo, durante la Semana Mayor –en la liturgiacatólica– este místico ritual prehispánico se presentará pararefrendar el por qué el cabildo y el Ayuntamiento lo declararánPatrimonio Cultural del municipio y crearán una asociación civilpara organizar a los distintos grupos que suman 42 voladores, asícomo las acciones para cuidar al medio ambiente, considerando elnúmero de árboles de más de 30 metros que se utilizan año conaño.
EL VUELO
El vuelo, declarado por la UNESCO, como Patrimonio CulturalInmaterial de la Humanidad y con más de 25 siglos de antigüedad,tiempo en el que se ha extendido hasta territorio nicaragüense,con sus variantes y diversificación de simbolismos, es uno de losíconos más emblemáticos de los pueblos originarios de Puebla ysu vecino estado de Veracruz.
Es una manera para pedir permiso a la Madre Tierra y así lograrbuenas siembras. El ritual inicia desde que se elige el árbol, sepide permiso para cortarlo y se hace un ritual del perdón;usualmente en septiembre, aunque el madero o árbol es usado todoel año.
En un sincretismo claro entre la cultura macehual, totonaca ycatólica el árbol es cortado y trasladado hasta la comunidaddonde será erigido.
Un caporal dirige la danza, valiéndose de diferentes sones,para acompañar esa travesía del madero.
La comunidad recibe a los "faeneros" (quienes hicieronel trabajo de cortarlo y trasladarlo) con alimentos.
El día en que se va colocar el palo hay otro ritualque termina con mole de guajolote y se presentan ofrendas al piedel madero.
Una vez que queda bien fijado a la tierra, losdanzantes empiezan la escalada; ahí el caporal ejecuta los sonesque acompañarán el resto del ritual.
El clímax es cuando el caporal danza con zapateados intensos,al mismo tiempo en que toca la flauta y el tambor, luego esreemplazado por otro danzante para que el caporal pueda volar.
El caporal, haciendo reverencia los cuatro puntos cardinales,llevando algunos elementos que son simbólicos para ese vuelo, seyergue hacia atrás con los brazos abiertos y la mirada perdida aluniverso, en un acto de entrega total y conexión respetuosa con eltodo.
Tras esta reverencia, toma asiento en el centro, los danzantespreparan el vuelo de 13 vueltas, para hacer una representación alciclo del fuego nuevo, para dar una cuenta que suma 52, un númeromágico en la tradición prehispánica náhuatl. Llega el momentodel salto de fe.