“Nos vemos en el estadio de béisbol en el cielo”, le escriben sus hijos a Humberto Rodríguez, un poblano más en la lista de migrantes que falleció víctima del mortal coronavirus en Nueva York. Él fue un promotor de este deporte y fundó la Liga Mexicana de Béisbol en la ciudad que nunca duerme.
Humberto era oriundo de la localidad de San Isidro El Organal, perteneciente al municipio de Chietla en Puebla, pero el pasado 3 de abril perdió la batalla a las 6:50 de la tarde en el estado de Connecticut, siete días después, el 10 de abril su familia recibió sus cenizas.
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El 25 de marzo había cumplido 61 años de edad y días después tuvo que ser hospitalizado. “Tenía dificultad para respirar”, por lo que fue necesario ingresarlo, pero cuatro días después y tras recibir un respirador artificial, no superó la prueba. “Morir en el hospital, solo, es un camino cruel”, expresaron sus hijos, quienes solicitaron apoyo económico a través de la plataforma GoFundMe para realizarle un homenaje.
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“Beto - Beethoven Rodriguez”, como le apodaban amigos, fue un líder beisbolista y fundador de la Liga Mexicana de Béisbol en New York y de la que fue presidente durante 25 años.
De acuerdo a un medio de su localidad, en los ochenta Humberto emigró a Estados Unidos y ahí fue donde empezó su historia. Su pasión por el rey de los deportes lo llevó a organizar a sus compatriotas y conformar una liga con diferentes categorías que les permitiera jugar el deporte más popular de la región de Izúcar, pero esta vez en Nueva York.
Esta liga fue un parteaguas para que la comunidad hispana tuviera un motivo importante de recreación en la gran manzana y su éxito fue tan grande que logró albergar jugadores de diversas nacionalidades, como puertorriqueños, dominicanos, nicaragüenses, panameños e incluso norteamericanos, quienes se incorporaron a este gran proyecto que hasta la fecha sigue en pie.
El 1 de septiembre del 2019 fue la última vez que participó en un partido de béisbol. “Quien imaginaria que fuera a ser tu último domingo beisbolista, mi padre adorable”, le escribe una de sus hijas.
En otra imagen compartida en redes sociales se muestra a Rodríguez cargando en sus brazos a una bebé, su nieta, un privilegio según la familia, para este poblano.
La familia anuncia que celebrarán una misa honrando su recuerdo en una Iglesia de Brooklyn, antes de envíar sus cenizas a México, pues su último deseo era que lo enterraran en México, junto a Inés Vergara y Salomé Rodríguez, sus padres.
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