Los empresarios del sector restaurantero en Puebla advirtieron que el Centro Histórico se ha convertido en un riesgo para los empresarios y para los visitantes, debido a que el primer cuadro ha sido abandonado por la Policía, a tal grado que la madrugada del martes, un comando armado de 10 personas ingresó a un restaurante ubicado frente al zócalo, sin que la autoridad respondiera al llamado de auxilio de los trabajadores.
"Estamos cansados de que esto esté pasando", dijo la presidenta de la Cámara Nacional de la Industria de Restaurantes y Alimentos Condimentados (Canirac), Olga Méndez Juárez, quien agregó que ya no hay focos rojos en la ciudad, pues toda ésta se ha convertido en una zona de riesgo.
Después del atraco que sufrió el restaurante afiliado, tanto Méndez como empresarios del sector, exigieron a la presidenta municipal, Claudia Rivera Vivanco, y al gobernador, Luis Miguel Barbosa Huerta, rondines en todo Puebla, y sobre todo en el primer cuadro, que es el punto más concurrido tanto por el turismo como por los locales.
En rueda de prensa, el representante de Sabor a Puebla, Juan José Herrera, explicó que cerca de las 24:00 horas del martes, dos comensales –que en realidad eran parte de los delincuentes- se esperaron en el restaurante hasta ser los últimos clientes. Una vez que ya solo estaban ellos y los empleados, pidieron la salida y, justo en el momento en el que les abrieron la puerta, los malhechores ingresaron a robar.
Primero, hurtaron en sistema de videograbación y, posteriormente, fueron por el dinero en efectivo que el negocio recaudó en El Buen Fin (cerca de 200 mil pesos); después robaron dinero y celulares de los trabajadores.
Tras el robo, el personal corrió a buscar ayuda, pero la patrulla que encontraron, los evadió. Siguieron caminando hasta encontrar a otra unidad, la que –pasada una hora del atraco- llegó al restaurante.
Méndez, Herrera, Ricardo Gamboa y Julio Silva, todos del sector restaurantero, exigieron que haya seguridad y que se revise la calidad de las imágenes que captan las cámaras municipales, pues se tienen versiones de que la imagen que captan es de mala calidad, por lo que no sirve para las investigaciones. Los restauranteros dijeron que la inseguridad está saliendo de control en el municipio y en el estado.
Advirtieron que, de continuar la situación de la misma manera, saldrán a manifestarse las veces que sean necesarias.